Arte frente a la violencia armada contra hombres y bestias
El artista sudafricano Ralph Ziman, conocido por una serie que visibiliza el drama del negocio de las armas en África, vuelve a poner a sus víctimas en el punto de mira
Nació en Zimbabue, pero hasta los 19 años vivió en la ciudad sudafricana de Johannesburgo. Hoy, desde Hollywood, el escritor, fotógrafo, productor y director de cine Ralph Ziman, canaliza las nefastas consecuencias del negocio armamentístico en el continente a través del arte para provocar un seísmo en la conciencia colectiva. A través de dos series fotográficas, el artista nos invita a actuar tanto desde dentro como desde fuera de África para terminar con el sufrimiento humano y para frenar la guerra contra su fauna.
Pregunta. Su nombre saltó a la fama con Ghosts (Fantasmas), un trabajo brillante que mezcla fotografías coloridas con un trabajo de orfebrería que consigue causarnos vértigo emocional cuando nos damos cuenta de lo que hay detrás de él. ¿Cuál fue su propósito para esta serie?
Respuesta. Mi inspiración vino de la fascinación por las armas de fuego en general que hay en Sudáfrica. Visualmente la AK 47 es muy distintiva. Es un icono, como la botella de Coca-Cola o los arcos dorados de Mc Donald. En Sudáfrica esta arma tiene mucho peso porque es vista como el arma de la liberación, un símbolo de la lucha antiapartheid. Pero también se ha convertido en un símbolo de la violencia rampante, de los atracos a los bancos, el robo de vehículos o los hurtos callejeros... Donde vemos la AK 47 en África vemos guerra y muerte. Los piratas somalíes, la guerra en Sudán del Sur, los rebeldes en la República Democrática del Congo, los terroristas de Boko Haram... Se estima que la AK 47 ha matado a más gente que la bomba atómica y el sida juntos. Muchas de las personas asesinadas o desplazadas por las guerras libradas con esta arma son mujeres y niños. Siempre vemos los señores de la guerra, las milicias armadas…, pero casi nunca vemos las víctimas. Ellos son mis fantasmas, invisibles, anónimos.
P. El dinero recaudado de las exposiciones de Ghosts fue donado a Human Rights Watch para la lucha contra las armas en África, ¿verdad?
R. Si, y tal vez este dinero sirva para recorrer un pequeño camino para hacer las cosas mejor. Pero en realidad, a todo lo que puedo aspirar es a sensibilizar acerca de los problemas, impulsar el debate, y llevar la mirada de la gente hacia este foco. Quiero apelar a un público más joven, a las personas que aún están formando sus puntos de vista sobre el mundo. Hay muy buenos trabajos solidarios, tanto en Sudáfrica como en el plano internacional que apoyan los derechos humanos, el control de las armas y proporcionan ayuda a las víctimas de la violencia armada.
Se estima que la AK 47 ha matado a más gente que la bomba atómica y el sida juntos
P. Ahora, con Bones (Huesos), vuelve a dar una bofetada a nuestras conciencias y nos muestra una vez más una realidad cruda y cruel cubierta en la estética pop y de colores. ¿Por qué ha decidido centrarse en la caza furtiva en esta serie?
R. Cuando vuelo desde los EE UU a Johannesburgo tomo un vuelo directo desde Atlanta. Me sorprende siempre ver a decenas de hombres con armas de caza y vestidos de camuflaje cuando esperamos el equipaje en las cintas del aeropuerto. La caza legal de animales africanos es un gran negocio. Por un puñado de dinero puedes disparar un rinoceronte, un elefante, un búfalo o un león. Me sorprende que la gente pueda recorrerse medio mundo sólo para matar a un animal en su hábitat natural. Pero aún peor es la caza furtiva... La población de elefantes en África ha disminuido de 10 millones a 500.000 en tan solo una década. El último censo publicado indica que ya solo quedan 350.000 elefantes en todo el continente africano.
El rinoceronte blanco está casi extinguido por el tráfico de su cuerno. El valor del cuerno de rinoceronte es ahora superior al del oro. En realidad, se compone de queratina, la misma sustancia de la que están hechas nuestras uñas de los pies. Pero esto no ha impedido que se convierta en un símbolo de estatus en lugares como China, donde los juerguistas en discotecas rallan un poco en sus bebidas y las de sus amigos para ostentar su riqueza. Por eso en Bones he querido reflejar tanto la belleza como la fragilidad de la fauna africana.
El valor del cuerno de rinoceronte es ahora superior al del oro
P. Hay una cierta obsesión por la cultura de la muerte en tu trabajo. ¿Es de los que cree que el arte debe servir para denunciar situaciones de violación de los derechos?
R. La muerte es parte de la vida. Todos tenemos nuestras propias formas de tratarla. No quiero traumatizar a la gente pero ciertamente quiero llamar su atención. Yo, que crecí en Sudáfrica en los años del apartheid, me hice muy consciente de las injusticias políticas y sociales, y creo que esto se ha manifestado en todos los trabajos que he hecho.
P. Es difícil que las voces de los artistas africanos críticos se tengan en cuenta en los foros internacionales de arte. Sin embargo, su nombre resuena en los principales periódicos estadounidenses, en las revistas de moda y ferias de arte en todo Occidente. ¿Era su intención inicial generar un impacto tan grande fuera de África? ¿Cree que ha llegado a sacar los colores a los cazadores furtivos, traficantes de armas o personas que, sin saberlo, financian empresas de armas a través de sus cuentas bancarias?
R. Quería dar a conocer estas cuestiones, tanto en África como en el resto del mundo. En última instancia, creo que son los africanos los que tienen que luchar contra la caza furtiva y hacer frente a los dictadores que oprimen a sus pueblos. Pero es el resto del mundo el que tiene que dejar de suministrar armas a cualquiera que pueda pagarlas. Y es responsabilidad de la comunidad internacional el hacer frente a los problemas de la desigualdad que alimentan estas guerras. Un cazador puede hacer más dinero matando a un único rinoceronte de lo que puede trabajar durante dos años…
Wiriko es una asociación cultural que tiene como objetivo la difusión de las manifestaciones artísticas y las culturales africanas contemporáneas. Desarrolla actividades de divulgación a través de un magacín en línea y de formación mediante el Aula Virtual.
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