La relatividad de los sentimientos

La distancia entre dos puntos se mide en metros; la distancia entre dos eventos se mide en tiempo; la distancia en nuestra memoria viene determinada por una mezcla confusa de ambos parámetros. Los terribles atentados de Bruselas nos generan un dolor inversamente proporcional a su cercanía en el tiempo y en el espacio. Pero si nos desplazamos en el espacio manteniendo el tiempo, nos encontramos con un atentado en Pakistán donde han muerto más personas y nuestro dolor es proporcional a los escasos minutos dedicados en los medios. Si mantenemos la cercanía del espacio retrocediendo en el tiempo, nos hallaremos ante un monumento decrépito en Madrid como único recuerdo de un fatídico 11 de marzo del 2004. Cuando el tiempo y el espacio se alejan como para doblar el tejido de nuestros sentimientos, se produce un agujero negro del olvido como es el caso de Haití, Ruanda, Birmania, Ucrania. La distancia hace el olvido, aunque los olvidados tengan muy presente cada día que su dolor es el fruto de nuestro olvido.— Nuno de Nerga.