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Tentaciones

Ligué por Internet con la foto de un conejo gigante y esto es lo que aprendí

He intentado ligar por Internet con la foto de un conejo gigante como única foto de perfil. Y esto es lo que he aprendido

El conejo gigante de la serie televisiva británica 'Misfits'.
El conejo gigante de la serie televisiva británica 'Misfits'.

Hay quien dice que por Internet se liga rápido, fácil y directo a la cama. No sé, las redes sociales para conocer ejemplares del sexo opuesto siempre han perdido en mi balanza personal frente al encuentro casual con una desconocida. Todos empezamos siendo desconocidos, como decía Tarantino en Four Rooms. Las redes sociales de contactos, para amistad y lo que surja, se jactan de que 1 de cada 3 parejas se conoce por Internet. Hemos puesto a prueba esta aseveración y hemos decidido romper con los estándares: He intentado ligar por Internet con la foto de un conejo gigante como única foto de perfil.

Foto de perfil de Francisco Miguel Espinosa caracterizado de conejo gigante.
Foto de perfil de Francisco Miguel Espinosa caracterizado de conejo gigante.

Y esto es lo que he aprendido:

Llamas la atención: Frente al tópico de que una foto casual, con una media sonrisa, bien arreglado pero algo tirado, con una pose algo forzada, en algún lugar exótico es lo que te asegura la aceptación, la realidad es que con un conejo gigante llamas la atención rápidamente. La mayoría de las chicas en redes sociales están hartas de ver fotos de tíos de ensueño, cachas y posando con sus coches. Un conejo gigante rompe el hielo mejor que cualquier cosa.

Se espera que seas original: Si te has puesto la foto de un conejo gigante, se espera que tu palabrería se encuentre a la altura. La mayoría de las chicas abordadas con este método dejará de responder si no eres elocuente y un poco caradura.

La mitad se espera que seas feo: Lo asumen, y les da igual. De momento, eres lo suficientemente original como para que no importe que seas feo. Si no tienes ninguna foto de perfil, es porque tu perfil no es una maravilla que enseñar. No importa, trabaja tu personalidad, que aún tiene tirón.

La otra mitad espera que seas increíblemente guapo: Asumen que eres un Adonis incomprendido cuya belleza eclipsa los verdaderos sentimientos de la gente, por lo que quieres llegar a un conocimiento profundo de la otra persona sin adulteraciones causadas por tu espectacular físico. Estas dejan de hablarte cuando les enseñas tu foto real.

Un porcentaje (dependiendo del tipo de página) pensará que eres un psicópata: Y te lo dirán a la “cara”, sin ningún problema. Si te pones la foto de un conejo gigante, muy normal no eres.

Encontrarás fauna salvaje de lo más extraña: Tendrás que asumir que atraerás a las personas más raras, peculiares o perturbadas de cada página web. Vive con ello, que tú tampoco eres de lo mejorcito del barrio en lo que a salud mental se refiere.

Date prisa, porque tu foto no durará: Las páginas web de contacto se toman muy en serio lo de que tu foto de perfil sea real, por lo que el simpático conejo no durará. Las hay más eficientes y las hay menos, pero en general en menos de 48 horas te quedarás sin foto. Y si reincides demasiado en tus intentos, probablemente eliminarán tu cuenta.

Crearás tendencia: Muy probablemente surgirán en la misma web un montón de perfiles con animales como foto de presentación. Marcarás tendencia y la red perderá parte de su atractivo, pero te hartarás de ver gatos con sombrero, perros con puros, iguanas con corbata y tortugas con monóculo.

Una vez aprendidas estas lecciones, la vida del ligue por Internet parece no tener más secretos que esconder. Claro que Internet es muy grande y hay de todo. Para dar una vuelta de tuerca más al asunto, hemos buceado en algunas web que pasan de “amistad” a directamente “lo que surja”. Y hemos puesto a prueba al conejo.

Y estos son los mitos que he tumbado:

La gente no se acuesta con el primero que pasa: Si todo el que entra en una web de búsqueda de sexo se acostase con el primero que tiene un conejo como foto de perfil, tendríamos problemas. La gente es selectiva, incluso cuando lo que buscan es sexo indiscriminado.

Perversiones sexuales: No a mucha gente le gustaría que te vistieras de conejo gigante a la hora de entrar en materia. Y la mayoría te lo deja claro en la primera conversación. Aunque repito: no a mucha...

No se llega a un nivel profundo de conocimiento de la otra persona: Con conejo o sin él, Internet es lo que es y no sirve para conocer realmente a una persona y enamorarse de ella. Como primera aproximación, es una herramienta más. Una excusa: como un bar, o una fiesta. Pero al final, tendréis que quedar. Y entonces, explícale que no eres realmente un conejo gigante.

Es más estresante que divertido: Cuando tienes perfil en varias de estas web de contacto, y si mantienes correspondencia digital con varias personas a la vez, al final te estresas. Lo más fácil es descargar las aplicaciones para móviles, pero entonces tu móvil no dejará de sonar. La mayoría de la gente con la que contacté empleaba una sola frase en cada mensaje, por lo que no era raro recibir más de trescientos mensajes en una conversación normal de una hora. Esto no te deja trabajar, ni salir con tus amigos, ni vivir, ni nada. Al final, quieres darte de baja y tirar tu móvil por la ventana.

¿Y por qué un conejo gigante?: Quizás Freud tendría algo que decir al respecto: yo no. No sé por qué la primera imagen que me vino a la mente fue ese conejo trajeado de la serie Misfits y fue lo que me puse de perfil. Lo que sí tengo claro es por qué oculté mi cara: la gracia de hablar con gente desconocida, con chicas, y que la posibilidad de un encuentro esté abierta, pasa porque seamos totales desconocidos. Como si se tratara de un baile de máscaras, a mí también me gustaría que las chicas con las que hablaba no tuvieran foto de perfil. Así se mantiene una última tensión, una duda. ¿Cómo será? ¿Nos gustaremos físicamente? La realidad es que no todo el mundo que se oculta tras un avatar es gente fea o inadaptada: algunos, simplemente, disfrutan manteniendo un poco más el misterio.

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