_
_
_
_

El cometa de Rosetta en colores

El objeto celeste, casi negro, está cubierto de un polvo oscuro

Fotografía en color del cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko tomada por la cámara Osiris de la nave `Rosetta´ el pasado 6 de agosto, a una distancia de 120 kilómetros.
Fotografía en color del cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko tomada por la cámara Osiris de la nave `Rosetta´ el pasado 6 de agosto, a una distancia de 120 kilómetros. ESA/Rosetta/MPS for OSIRIS Team MPS/UPD/LAM/IAA/SSO/INTA/UPM/DASP/IDA

El cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko es un cuerpo grisáceo, aún fotografiado en colores tal y como lo vería el ojo humano. “Parece gris oscuro pero en realidad es casi negro, como el carbón”, dice Holgen Sierks, investigador principal de la cámara Osiris de la nave espacial Rosetta con la que se ha tomado la imagen. Solo se aprecian sutiles variaciones de color en la superficie del objeto celeste, señalan los científicos.

En realidad la foto presentada ahora por los expertos de la Agencia Europea del Espacio (ESA), con una resolución es de 3,9 metros por píxel. es una superposición de imágenes tomadas secuencialmente con filtros en las longitudes de onda rojo, verde y azul. Pero, como el cometa rota durante la secuencia, las tres imágenes están ligeramente desplazadas una respecto a otras y ha exigido mucho trabajo sobreponerlas debidamente para obtener el resultado final. Por eso se ha tardado tanto tiempo en tenerla lista.

Los científicos explican que, como en otras fotografías tomadas por la Rosetta del 67P/Churyumov-Gerasimenko, se ha realzado el rango del blanco al negro para que se aprecien más detalles, pero los colores no se han realzado, es que el cometa es realmente gris oscuro. Sin embargo, el análisis detallado de las fotos muestra que la superficie refleja ligeramente más eficazmente la luz roja que otras longitudes de onda. “Es un fenómeno bien conocido en otros pequeños cuerpos del Sistema Solar y se debe al pequeño tamaño de los granos de la superficie”, explican los especialistas de la misión. Pero esto no significa que el cometa pudiera parecer rojizo para el ojo humano.

En las fotografías tomadas con telescopios en la Tierra ya se veía el 67P/Churyumov-Gerasimenko grisáceo, recalcan los científicos, pero ahora que la cámara Osiris es capaz de tomar imágenes de cerca, sorprende el color extremadamente homogéneo de este cuerpo incluso a escala de detalle, lo que indica que apenas hay variaciones de composición en la superficie. Si hubiera hielo se apreciaría más brillante con el filtro azul, pero no parece que haya áreas así y el color gris general indica que el cometa está cubierto por algún tipo de polvo oscuro. Los científicos intentan averiguar ahora de qué está hecho ese polvo.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_