Es preferible el canal de Panamá

“Hemos cruzado el cabo de Hornos" es la metáfora utilizada por el presidente Rajoy para dar a entender que lo peor de esta crisis ya ha pasado, que la recesión se ha acabado y que ahora ya estamos en el rumbo correcto. Ahora toca el crecimiento de la economía y, en consecuencia, la creación de empleo y todos felices y contentos con un poco de paciencia. Pero la triste realidad es que tenemos seis millones de parados, la mitad de ellos sin título de educación secundaria y sin cualificación y una gran parte con edad superior a 45 años. La primera pregunta es obvia: ¿basta con que crezca la economía para que parte de estos seis millones de desempleados se transformen en mano de obra cualificada y otra parte rejuvenezca por haber cruzado el cabo de Hornos?

No nos engañemos ni tratemos de confundir al ciudadano medio ni deprimir aún más a los parados durante los próximos dos años de legislatura. En nuestra opinión el rumbo debe ser corregido después de un debate en profundidad sobre las cuestiones siguientes:

a) La reforma fiscal actualmente en proceso debe tener como objetivo principal incrementar sustancialmente la recaudación tributaria, incidiendo especialmente contra el fraude fiscal, con el permiso, por supuesto, de los grandes patrimonios, rentas y beneficios.

b) A corto plazo hay que volver al ladrillo dando preferencia al sector de la rehabilitación de edificios para ahorro de energía, con el permiso, claro está, del oligopolio eléctrico.

c) A largo plazo hay que apostar por el conocimiento, incrementando sustancialmente parte de los recursos aportados por los contribuyentes para su dedicación a la investigación y desarrollo.

Un recado para el señor Rajoy: para alcanzar el Pacífico es preferible el canal de Panamá.— Benjamín Rodríguez Vera.