El patrimonio nacional
Un país lo forman sus habitantes y sus tierras, pero también, y cada vez más, sus infraestructuras: carreteras, puertos, líneas de comunicaciones, etc. Estas infraestructuras se han creado con el esfuerzo y el capital de sus ciudadanos: con sus impuestos. En España son propiedad de todos los españoles: es nuestro patrimonio.
Este Gobierno, y también los anteriores, han ido disponiendo de nuestro patrimonio como si se tratara de uno privado. También lo han hecho los ayuntamientos y comunidades autónomas, cada una de sus privatizaciones nos ha empobrecido. Somos más pobres de lo que éramos antes de que se privatizara Telefónica o Endesa.
Independientemente de si la gestión privada es más eficaz que la pública, cosa que habría que demostrarse, la propiedad del patrimonio nacional debe permanecer en manos públicas. Debería de legislarse en ese sentido evitando que gobiernos municipales, de comunidades o nacionales (a menudo con intereses privados espurios) puedan arruinarnos.— Francisco Castro Soler.
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