No culpabilicemos a las familias
El caso del educador social de Castelldans acusado de pederastia, y familia acogedora durante años, vuelve a poner de evidencia la necesidad de cambios profundos en el sistema de protección de menores. Pero nos preocupa que la única propuesta sea incrementar más los controles sobre las familias acogedoras y se acabe culpabilizando a personas que desarrollan una labor tan importante: acoger a un menor cuando éste no puede estar con su familia biológica o extensa.
Esta persona había pasado más de 30 controles. ¿No indica esto alguna responsabilidad del Instituto Catalán de Acogimiento y Adopción? ¿Se tomarán medidas para que sus técnicos no repitan más estos errores? Tenemos un sistema administrativo complejo, las familias que quieren acoger se quejan de las dificultades que ello supone, y por tanto la solución no puede ser hacer el sistema aún más complejo. Quizá en los técnicos que toman decisiones también se necesiten cambios. No culpabilicemos implícitamente a las familias, porque el mejor sitio para un menor siempre será una familia.— Francisco Cárdenas. Presidente de APRODEME, Asociación para la defensa del menor.
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