Madrid insta al Gobierno a asumir el coste de fomentar el transporte público

El consejero de Economía y Hacienda de la Comunidad de Madrid, Antonio Beteta, ha dicho esta tarde que si el Gobierno de España quiere incentivar el uso del transporte público, tendrá que ser él quien lo pague. Así lo ha manifestado antes de participar en la Conferencia Sectorial de Industria donde el ministro, Miguel Sebastián, expondrá a las comunidades las medidas de ahorro energético. Beteta ha explicado que asiste a esta reunión sin que el Gobierno haya remitido ninguna documentación ni ninguna propuesta para ahorrar energía, a excepción de "las ocurrencias" que se han conocido a través de la prensa y las valoraciones de los distintos ministros sobre los efectos de la limitación de la velocidad, la iluminación o el precio del metro.

El consejero ha criticado al Ejecutivo por plantear una reducción de los billetes de los transportes públicos cuando el Estado ha rebajado la aportación a las autonomías para el transporte público en los presupuestos. También ha expresado su deseo de que ahora Industria haga "un planteamiento serio" para descarrillar la Estrategia de Ahorro Energético, en lugar de aplicar una política "errática" como, a su juicio, hace hoy en día. Respecto a la propuesta de reducir el billete de Cercanías, el responsable de la Economía madrileña ha afirmado: "Cuando nos den el dinero, nosotros lo rebajamos encantados". El Estado lo que tiene que hacer es reponer la aportación de 20 millones de euros que ha rebajado a la Comunidad de Madrid por este concepto, ha indicado Beteta.

El Gobierno de Madrid incide así en la oleada de críticas, sobre todo en esta región y en Cataluña , que ha provocado el anuncio del Gobierno del pasado viernes de rebajar en un 5% los billetes de tren de Cercanías y media distancia a partir del 7 de marzo para incentivar el uso del transporte público. La Comunidad, en concreto, ya se negó ayer a asumir la petición de Blanco de extender la reducción al suburbano y los autobuses, porque el coste, dijo, sería insoportable: 45 millones de euros al año.

El vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, ha respondido esta mañana a la propuesta del ministro de Fomento, José Blanco, que el lunes sugirió que "sería bueno que la Comunidad rebajara el precio del billete de metro". "El problema no es bajar el precio de los billetes, que son muy baratos, sino aminorar el coste de la energía", ha dicho González. "El problema es que el Gobierno no ha querido hacer una reforma del mercado energético, que es algo inaplazable. Además, ha metido cargas adicionales sobre el coste de la energía", ha señalado el vicepresidente en declaraciones a Telemadrid. González ha insistido en que "el precio de la electricidad también es resultado de la política de este Gobierno, que es una política errática".

"No van a ahorrar ni un solo euro"

El consejero de Presidencia, Justicia e Interior de Madrid, Francisco Granados, también ha criticado durante esta y el resto de medidas del Gobierno central para el ahorro energético. Para Granados, las iniciativas de reducción a 110 kilómetros por hora como máximo en las autopistas y autovías y la bajada del billete de Cercanías son "absolutamente inútiles, no aportan absolutamente nada y no van a ahorrar ni un solo euro". "Es un debate falso, engañoso y creo que es una absoluta tomadura de pelo. ¿Alguien se cree que porque se baje el precio del Cercanías un 5% alguien va a tomar la decisión de dejar el coche y tomar el tren?", se ha preguntado.

En este sentido, el consejero ha esgrimido que sólo el 4% de los viajeros madrileños del transporte público ferroviario compra el billete sencillo y que la pretendida reducción del precio del transporte público se cargaría a las arcas públicas. "No sé dónde está el negocio. La bajada del 5% del abono supondría 3,5 euros menos al mes", ha apuntado. Granados ha aconsejado al Blanco y al resto del Gabinete que incidan en la reducción de los costes de la energía porque "una subida del casi 60% de la electricidad desde que gobierna Zapatero parece que no cuadra mucho con estas teorías del ahorro energético". Frente a la opinión del PP, el secretario general del PSM y candidato a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Tomás Gómez, ha mostrado el apoyo de los socialistas madrileños a la idea de precio del billete del metro, ya que así se fomentaría la afluencia de viajeros en transporte colectivo. "No hay, desde luego, ningún argumento sólido por parte del Gobierno autonómico para no hacer un esfuerzo en ese sentido", ha señalado Gómez.

El consejero de Transportes e Infraestructuras de Madrid, José Ignacio Echeverría, que ya ayer dijo no a la propuesta de Blanco, ha asegurado que es una "operación mediática" para desviar la atención pública de otros "problemas" como el paro. Echeverría ha señalado que la bajada del 5% se ha realizado "sin consultar con las administraciones competentes", que son las comunidades. "La propuesta la realiza el Gobierno de España, que justo está agravando con un importante crecimiento del IVA el transporte", ha apuntado. En este sentido, ha señalado que "como consecuencia de no tener una política energética", Metro está viendo como sus costes "están incrementándose de una manera que no sabemos hasta donde va a llegar".

El Consorcio Regional de Transportes sostiene que la rebaja de tarifas que anunció el Ejecutivo será ridícula en Madrid, porque afectará solo al 4% de los viajes en transporte público: el 96% no viaja en cercanías sino en metro o autobús; o, si viaja en cercanías, lo hace con billetes del Consorcio, cuyo precio no fija Fomento. A propósito del precio del transporte en Madrid, UGT ha elaborado un estudio en el que se afirma que el precio del abono transporte en la región ha subido muy por encima del IPC desde 2000. Lo mismo le ocurre al billete de 10 viajes, que vale tanto para el metro como para el autobús. Las críticas más feroces a la rebaja anunciada por el Gobierno, sin embargo, han llegado desde Cataluña, que recibió hace un año las competencias del tren de cercanías y tendría que afrontar el coste. El Ejecutivo catalán está muy molesto porque, teniendo las competencias para fijar el precio de los billetes, no fue informado de los planes de Fomento y ahora deberá recortar otras partidas.

En respuesta, el ministro de Fomento ha advertido a Cataluña y Madrid que deberán explicar a los ciudadanos "por qué se niegan" a bajar los precios del transporte público en un momento "en el que es necesario implementar medidas de ahorro energético". Blanco ha avisado de que "Madrid no está para bromas después del debate" sobre la contaminación de la capital española. "Va siendo hora de que el Ayuntamiento y la Comunidad y todo el mundo se pongan las pilas para implementar medidas que lleven a una menor contaminación", ha dicho. Así, el ministro ha asegurado respetar las decisiones de los gobiernos catalán y madrileño, pero ha defendido que la rebaja de los billetes es "una iniciativa para impulsar el uso del transporte público", algo que "puede contribuir a una movilidad sostenible". "Está bien como método criticarlo todo pero está muy mal que los ciudadanos sufran las consecuencias de criticarlo todo", ha zanjado.