Trufas con marca propia

Una trufa de La Finesse Truffles sale de la tierra turolense un lunes, por ejemplo, y el miércoles está en manos del cliente. Pero este no es el camino habitual de este producto tan cotizado. “Como productor, veía los problemas que nos afectaban”, cuenta Carlos Aspas, fundador y consejero delegado de la empresa. “Es una cadena de suministro con intermediarios, sobresaturada. Desde que sale del origen hasta que llega al final puede pasar por cinco manos diferentes”. Esto, señala, impacta en la calidad del producto y en el precio.

A principios de 2019, Aspas registró La Finesse como empresa, junto a su socio Kilian Zaragozá, con la intención de atajar este y otros cuatro problemas que identificó en el sector: la ausencia de marca de referencia, el sobreprecio, productos sin valor añadido y la desconexión con el origen, la falta de transparencia en la trazabilidad. Hoy la compañía, que cuenta con un equipo de cinco personas, a las que se sumarán cuatro más en breve, factura alrededor de 150.000 euros y prevé doblar esta cantidad en la próxima campaña.

El origen, sin embargo, se remonta a unos años atrás. En 2016, a Aspas, ingeniero industrial que dedicaba a las fincas las tardes después del trabajo y los fines de semana, le escamaban las dinámicas que sufrían las producciones. “Malvendíamos el producto. Unas veces muy bien, otras veces muy mal, pero el esfuerzo era siempre el mismo y no se le daba ningún valor al origen”, recuerda. Así que investigó el mercado y acudió al final de la cadena. “Y empecé a hacer lo que se conoce como un producto mínimo viable”. La estrategia comercial se centra en el canal horeca (hoteles, restaurantes y cafeterías) y en la venta al por menor. Sus productos no están disponibles en la página web, pero el consejero delegado, de 27 años, prevé activar ventas relámpago en ella con propuestas innovadoras en colaboración con chefs.

Al margen de las trufas, La Finesse ha desarrollado una mantequilla con este hongo y unas esferificaciones a modo de perlas. “Esta línea de innovación surge de nuestra curiosidad por buscar productos diferenciadores”, señala. Ya trabajan en nuevas referencias que saldrán al mercado en esta campaña. Aunque no da muchos detalles, asegura que no se enfocarán únicamente hacia tiendas especializadas. En La Finesse, seleccionada recientemente por Lanzadera, la aceleradora del empresario Juan Roig, aspiran a que cuando alguien piense en trufa piense en ellos.