Nadia Calviño anuncia que revisará el impuesto a la banca y Yolanda Díaz le recuerda que pactaron mantenerlo

Nuevo roce entre las dos principales vicepresidentas económicas del Gobierno. Nadia Calviño, vicepresidenta primera y ministra de Economía, avanzó ayer que es el momento de “revisar” el impuesto extraordinario a la banca porque “las circunstancias han cambiado” y el actual escenario de tipos de interés va a ir a la baja en los próximos meses. Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, advirtió de que el gravamen debe mantenerse porque así consta en el acuerdo de gobierno entre PSOE y Sumar a pesar de que Calviño no ha mencionado en ningún momento la supresión del impuesto.

El Gobierno aprobó a finales del año pasado dos impuestos para gravar los beneficios extraordinarios de la banca y las energéticas ante la subida de los tipos de interés y los precios de la energía, que han estado brindando pingües beneficios a estos sectores. El Ministerio de Transición Ecológica ya ha adelantado que estudia reformular el gravamen extraordinario sobre las empresas energéticas para tener en cuenta las inversiones verdes en el diseño del tributo. Y ahora Calviño abre la puerta a revisar también la tasa a la banca.

“Me parece que es el momento de revisar y ver si hay que ajustar algunos parámetros en el nuevo escenario en el que estamos, en el que ya no hay esa subida tan rápida de los tipos de interés y esa subida tan rápida de los precios de la energía. Tenemos que ver si en esos dos impuestos hay que hacer algún ajuste o no”, ha apuntado Calviño en declaraciones a Antena 3. La ministra de Economía ha insistido en que el Gobierno “hizo muy bien en poner esos impuestos en ese momento, que además han cumplido con la recaudación prevista por Hacienda y servido de ejemplo para otros países europeos. “Creo fue una buena decisión. Igual que ahora me parece que es el momento de revisar y ver si hay que ajustar (...) Siempre lo hemos dicho, que íbamos a hacer el análisis de esos dos impuestos para ver si hay que mantenerlos de cara al futuro y con qué parámetros, de cara a que sigan teniendo el mismo impacto positivo desde el punto de vista de la recaudación y desde el punto de vista económico”, ha.

Pero pocos minutos después, Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, se mostró “en total desacuerdo” con la posibilidad de eliminar el gravamen y recordó que ambos impuestos tienen que mantenerse para cumplir el acuerdo de Gobierno entre el PSOE y Sumar. “El acuerdo tiene que ser cumplido”, ha insistido. “Le diría a la señora Nadia Calviño pacta sunt servanda (lo pactado, obliga) y que acabamos de cerrar un acuerdo con el PSOE, que dio la presidencia del Gobierno al señor Sánchez, en el que, de manera clara, justamente en momentos de crisis de inflación sin precedentes, los que más tienen, más tienen que aportar”, ha añadido en declaraciones a los medios desde Bilbao, donde se ha reunido con colectivos de trabajadores. Díaz subrayó que los datos de beneficios antes de impuestos de las energéticas y de las entidades financieras son “absolutamente contundentes”. Y remachó: “Por tanto, más que nunca, deben de aportar”.

Tras las declaraciones de Díaz subyace un pulso soterrado entre ambas dirigentes que se prolonga desde la pasada legislatura y que en las últimas semanas ha vivido un nuevo capítulo a cuenta de la reforma del subsidio de desempleo. Díaz acusa a Calviño de inmiscuirse en los asuntos de su departamento y la vicepresidenta primera avisa a la líder de Sumar de que ella es la que coordina todas las decisiones de política económica.

Subsidio por desempleo

Díaz ha reconocido que las posturas en el Gobierno sobre la reforma del subsidio por desempleo son “distantes”, pero confía en llegar a un acuerdo con el PSOE, avisando de que “no sería tolerable un recorte”. Díaz ha asegurado que su el Ministerio de Trabajo, que dirige, “no va a compartir un recorte de los derechos de los trabajadores”. La dirigente gallega de Sumar ha advertido que el PP ha sido el único que “se atrevió a recortar nada más y nada menos que la protección social de los trabajadores” y ha recordado que Mariano Rajoy “llegó a eliminar el subsidio para mayores de 52 años”. En este sentido ha señalado: “La propuesta que hace el Ministerio de Trabajo, que soy la competente para ello, como consta específicamente en el componente 23 (del Plan de Recuperación), va a seguir defendiendo a los trabajadores y trabajadoras de nuestro país”, ha recalcado antes de advertir de que no van a apoyar “ningún recorte”.

Calviño defiende un diseño del subsidio que eleve los incentivos para que los desempleados busquen trabajo mediante un mecanismo para compaginar el nuevo empleo y la ayuda pública durante un tiempo. Díaz, por su parte, quiere aumentar los subsidios para proteger más a los parados y plantea fórmulas para no estigmatizar a este colectivo. Durante este debate entre las dos almas del Ejecutivo de coalición, la líder de Sumar recordó hace unos días que las competencias de Empleo son suyas, en un claro mensaje a la responsable de Economía para que no se inmiscuya en su terreno.

La vicepresidenta primera ha dejado claro este viernes que la reforma del subsidio por desempleo “no es una cuestión” de los ministerios de Economía o Trabajo, sino que “afecta muy directamente a Seguridad Social y a Hacienda”. Y ha agregado: “Por tanto, tenemos que coordinar los distintos puntos de vista para que sea la mejor reforma posible y a mí eso me parece normal”, ha dicho a Antena 3. Calviño ha subrayado que esta reforma del subsidio culmina las reformas laborales puestas en marcha en la anterior legislatura y confía en que pueda alcanzarse un acuerdo sobre la misma lo antes posible. “Estamos todavía en ese trabajo y yo espero que lleguemos a un acuerdo y que se pueda adoptar cuanto antes”, ha señalado al respecto.

La pausa es una “buena noticia”

La vicepresidenta primera ha considerado una “buena noticia” que el Banco Central Europeo (BCE) haya parado la subida de los tipos de interés, y ha negado que el alza tan “rápida e intensa” que se experimentó haya ralentizado la economía española de una manera preocupante.

“Lo que se ve es una ralentización importante de la economía europea y una bajada muy rápida de la inflación. España ya está en el 3,2%, la media de este año va a quedar en el 3,6% (...) Estamos viendo un impacto bastante moderado, excepto para aquellas familias y empresas que tienen créditos con tipo de interés variable. Y por eso hemos estado trabajando ya desde el año 2021 con los bancos, para poder dar medidas de alivio a las familias que tienen hipotecas con tipos de intereses”, ha explicado.

La vicepresidenta ha indicado que esas medidas de alivio se van a mantener y ha señalado que la próxima semana tiene otra reunión con las entidades bancarias para seguir avanzando en esta y otras medidas relacionadas con la atención a las personas mayores.

“Estamos viendo con los bancos ampliar el código de buenas prácticas para los deudores hipotecarios para extender al año que viene la posibilidad de cambiar las hipotecas de tipo variable a tipo fijo, de forma gratuita y también la amortización anticipada de los créditos. Esta ha sido una medida de alivio que está teniendo una gran acogida y que es muy importante y como todavía la subida de tipo se va a notar en las hipotecas el año que viene, vamos a extender al año que viene esa posibilidad de cambiar de forma gratuita”, ha explicado.

Calviño ha apuntado además que hablará también con las entidades de la extensión de los cajeros automáticos y otros sistemas de acceso al efectivo para todos los pueblos de España. “Ya estamos por encima del 90%, más de 250 pueblos han recibido o tienen ya un cajero u otro instrumento y todo esto lo voy a hablar con los bancos la semana que viene y con los usuarios bancarios”, ha precisado

Los depósitos ya se están remunerando

Sobre la remuneración de los depósitos por parte de las entidades financieras, Calviño ha indicado que “va mejorando y poco a poco los bancos ya están empezando a remunerar”.

“Lo notamos también porque está bajando relativamente la participación de los clientes minoristas en la compra de letras del Tesoro, pero hemos cerrado el año con una campaña de deuda pública extraordinaria. Se está pagando menos tipo de interés por la deuda española que por la alemana a corto plazo. Hemos cerrado una campaña de deuda en la que hemos podido emitir 5.000 millones de euros menos, en total 65.000 millones de euros en términos netos”, ha remarcado.

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