Sareb vende a Axactor una cartera de préstamos valorada en 3.000 millones
La operación es la mayor cartera de la historia de Sareb y consta de 8.000 préstamos
La Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) ha vendido al fondo noruego Axactor una cartera de préstamos fallidos, sin garantía hipotecaria, y valorada en 3.000 millones de euros, según han informado fuentes del sector y ha sido confirmado por Sareb. La operación, conocida como Proyecto Victoria, que se cerró el pasado martes, es la mayor cartera de la historia de Sareb y consta de 8.000 préstamos, según informa Expansión, que ha adelantado hoy la noticia. La cartera no tiene garantía hipotecaria y está formada por préstamos a empresas.
La estrategia de la Sareb pasa por vender préstamos unsecured (inseguros) —es decir, aquellos que no requieren como garantía una propiedad, sino que están garantizados por la solvencia del prestatario— a inversores institucionales, a los que se suele aplicar ajustes de precio, y reservar, en cambio, aquellos con garantía hipotecaria residencial para la venta minorista, donde pueden obtener más rentabilidad de los activos inmobiliarios. No ha trascendido, en cambio, el precio al que se ha cerrado la operación, si bien dependerá del éxito de recobro de la deuda que haga el fondo.
La consultora EY ha sido el asesor financiero de Sareb en la operación. Esta compañía ha sido elegida, de hecho, en los dos contratos de asesoría financiera que la entidad ha realizado en la primera mitad de este año, uno para la venta de carteras unsecured y otro para la venta de carteras de préstamos con garantía inmobiliaria de uso no residencial.
La Sareb, también denominada como “banco malo”, opera desde 2012, cuando recibió alrededor de 50.000 millones de euros en hipotecas con mucho riesgo, solares pendientes de recalificar, promociones a medio construir o viviendas en zonas secundarias de las que la banca se quería deshacer. Estos activos tóxicos se agruparon en la Sociedad para agrupar toda la deuda en una misma compañía cuya finalidad era ir liquidándola.
La idea era ir reduciendo la deuda, pero en la práctica la evolución no ha sido siempre buena. El ejercicio pasado, por ejemplo, perdió 1.506 millones de euros. Actualmente, el banco cuenta con más inmuebles que préstamos. De hecho, para la entidad resultan más rentables los primeros, ya que cuando tiene un préstamo impagado y acude a la vía judicial para quedarse con el bien que avalaba el préstamo, le resulta más sencillo extraer valor en la venta posterior si se trata de un inmueble o una casa que si simplemente se trata de derechos de cobro. Con la operación que cierra junto al fondo noruego Axactor, la Sareb se deshace de alrededor de 8.000 préstamos que no contaban con bienes inmuebles detrás.
Ya en 2018, Sareb cerró la venta a Axactor de una cartera de préstamos, también sin garantía hipotecaria, y valorada en 2.335 millones de euros. Cabe destacar que la deuda viva de Sareb —que computa como deuda pública— era, a cierre de 2022, de 30.481 millones de euros, tras registrar amortizaciones de 3.184 millones durante el pasado ejercicio. Para 2023, la compañía prevé reducir la deuda en otros 1.000 millones de euros, lo que supondrá que la deuda caiga por debajo de los 30.000 millones de euros.
En abril de 2023 la entidad cumplió su primer año con mayoría de capital público. Es el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) quien ahora tiene el control de la Sociedad, desde que se hizo con el 4,24% de su capital, pero en su primer año se anotó un deterioro adicional en sus activos financieros e inmobiliarios próximo a los 3.000 millones, debido, sobre todo, a un contexto de subida de tipos de interés y a un ajuste en el precio real de los activos que posee.
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