La economía catalana recorta terreno con Madrid, que creció menos que la media

La economía volvió a enderezarse en 2021 tras la sacudida del año anterior, cuando un tsunami que se presentó bajo forma de un virus arrasó con todo y hundió la economía hasta niveles que solo se habían conocido en tiempo de guerra. El repunte de la economía ha sido del 5,5%, aunque no todas las comunidades se han comportado con el mismo dinamismo. Las Islas Baleares registraron la mejor marca en 2021, con una variación anual del 10,7%, seguidas por Canarias (7%); en el otro extremo están Castilla y León (4,3%) y Aragón (4,4%), según refleja la Contabilidad Regional de España publicada este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en la cual el organismo desglosa con cuánta intensidad crece o se frena la actividad de cada territorio. En esta instantánea, la comunidad de Madrid se confirma como el pilar económico de España —mantiene su liderazgo en términos de renta per cápita y en volumen de PIB—, aunque el año pasado avanzó por debajo del promedio nacional y de Cataluña (5,8%), que de esta manera recortó algo la brecha que la separa de la región de la capital.

Era 2018 cuando Madrid dio el sorpasso a Cataluña, resultado de un ritmo de crecimiento más dinámico por un lado, y de una desaceleración por el otro. El frenazo del comercio internacional, junto a la incertidumbre en el sector del automóvil y la inseguridad y tensiones causadas por el procés frenaron la locomotora catalana, que solía transitar por encima de la media. En cambio, la región de la capital ha protagonizado un avance constante y sostenido. Repitió en lo más alto del podio también en 2020, pese a ser una de las comunidades que más sufrió el embate de la crisis. Pero en 2021 el PIB catalán repuntó más que el madrileño, un 8% en volumen frente a un 7,4%, reduciendo la brecha —de 6.000 millones a unos 5.200— entre los dos territorios, que continúan siendo los motores del país: conjuntamente, representan casi el 40% del PIB nacional.

El año pasado el cambio de tónica fue generalizado. La reactivación económica gracias al proceso de inmunización y a la paulatina reapertura de la actividad permitió ganar parte del terreno perdido a lo largo de los 12 meses anteriores. Según los datos del INE, nueve comunidades crecieron en 2021 por encima de la media de la UE, del 5,4%: Baleares, Canarias, Navarra, Cataluña, Cantabria, Comunidad Valenciana, Andalucía, Asturias y País Vasco. Madrid estuvo alineada con el bloque comunitario, mientras que se situaron por debajo Galicia, Murcia, Castilla-La Mancha, Extremadura, La Rioja, Aragón, Castilla y León y las dos ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.

Las islas fueron los territorios más dinámicos en 2021 también por el llamado efecto rebote: el año anterior, con la estadística plagada de signos negativos, experimentaron las caídas más intensas. Las economías de los archipiélagos balear y canario, más dependientes del turismo y de la movilidad internacional que otras autonomías, retrocedieron un 23,2% y un 19,1%, respectivamente (la media nacional fue del -11,3% en 2020). En cambio, las comunidades del interior como Extremadura o Castilla-La Mancha, que suelen ser más resistentes ante golpes externos, retrocedieron en menor medida.

Pese a la mejora generalizada, el PIB todavía no ha crecido lo suficiente como para volver a los niveles precovid, una meta que las casas de análisis no esperan alcanzar antes de finales de 2023 o 2024. Las islas son, una vez más, los territorios más rezagados: el PIB de Baleares todavía estaba en 2021 un 10,6% por debajo de los niveles de 2019, un 10,6% el de Canarias. Aragón y Castilla-La Mancha, por el contrario, son las regiones que más cerca están de las marcas anteriores a la pandemia, a solo un par de décimas de distancia.

El PIB de Cataluña también sigue un 3,7% por debajo de su nivel precovid —tras un descalabro mayúsculo en 2020, del 12,3%, un punto más que la media nacional—, mientras que el de la Comunidad de Madrid —cayó un 11% en la pandemia— se ha recuperado algo más y era en 2021 un 3% inferior a la época prepandemia, en línea con el promedio nacional. Esta marca no ha impedido al territorio capitalino volver a registrar, un año más, el mayor PIB per cápita, con 34.821 euros por habitante. Le siguen las autonomías forales: País Vasco (32.925 euros) y Navarra (31.024 euros). En la parte inferior de esta clasificación están Andalucía (con 18.906 euros), Canarias (18.990) y Extremadura (19.072). La media nacional fue de 25.498 euros, muy lejos de los 32.430 euros de la Unión Europea. Solo seis regiones superaron el registro medio nacional —Madrid, País Vasco, Navarra, Cataluña, Aragón, La Rioja—, y dos el europeo —Madrid y País Vasco—.

La economía aguanta

Las previsiones para 2022 han ido empeorando a medida que la guerra en Ucrania se prolongaba y con ella se enquistaba la crisis energética, que ha disparado la inflación hasta niveles desconocidos en décadas y la ha convertido en uno de los mayores rompecabezas de los bancos centrales. De ahí que todos los organismos y casas de análisis hayan ajustado a la baja sus pronósticos para la economía mundial y también para España. Sin embargo, los indicadores internos están dando sorpresas: el empleo aguanta, la producción industrial no se deteriora, el gasto con tarjeta crece y el turismo ha tenido una espectacular recuperación.

Por ello, el organismo de análisis de la entidad bancaria ha revisado dos décimas al alza el crecimiento para este año, hasta el 4,6% —un 1,2% en 2023; el Gobierno pronostica un 4,4% y un 2,1%, respectivamente—. “La economía resiste más de lo esperado en 2022. En el primer semestre, por demanda interna y turismo, y en el cuarto trimestre, por exportaciones y empleo”, señala el Observatorio Regional de diciembre del BBVA Research. “En 2023 y 2024 la demanda externa contribuirá negativamente, pero los fondos NGEU [Next Generation EU] y la menor incertidumbre impulsarán la recuperación, que será más rápida por el norte”, añade.

El organismo prevé que las islas continúen liderando el crecimiento este año y también el siguiente. A partir del segundo semestre de 2023, mejora también las estimaciones para las comunidades que producen bienes de inversión y de automóviles y que exportan a Europa, al considerar que serán capaces de aprovechar de mejor manera el impulso de los fondos europeos: País Vasco, Navarra y Galicia. El resto de comunidades del norte también experimentarán un mayor dinamismo: se acercarán al crecimiento medio de España en 2023, para superarlo o igualarlo en 2024.