El tirón de los ingresos reduce el déficit público en un 56% hasta mayo

El fuerte repunte de los ingresos mantiene a raya el desfase de las cuentas públicas. Los números rojos del conjunto de las Administraciones ―excluidas las corporaciones locales― alcanzaron los 19.629 millones hasta mayo, una cifra equivalente al 1,5% del PIB e inferior en un 56,4% al resultado del mismo periodo de 2021. En el supuesto del Estado, en este caso hasta junio, la cifra se sitúa en el 1,8% del PIB, un 41% por debajo del dato del ejercicio pasado, según los datos publicados este viernes por el Ministerio de Hacienda. En estos resultados influye el sostenido incremento en la recaudación de impuestos, empujada por la inflación y el empleo: se ha disparado un 18,3% entre enero y junio, hasta los 107.009 millones de euros.

A finales de mayo, la Administración central acumulaba el grueso del desfase, con 15.602 millones, pese al descenso con respecto a 2021. También la Seguridad Social ha reducido su déficit en comparación con el año anterior, en un 70,5%. Las comunidades autónomas, en cambio, han engordado en un 32,7% sus números rojos en los cinco primeros meses de este 2022, hasta el 0,23% del PIB. Un resultado que se explica un crecimiento de los gastos superior a los ingresos y por las menores de transferencias recibidas de parte del Estado.

En la primera mitad del año, de enero a junio, el Estado ha acumulado un déficit del 1,8% del PIB (23.487 millones) frente al 3,3% de 2021. El Ministerio de Hacienda achaca esta rebaja a la importante alza de los ingresos no financieros, de un 20,4%. Estos recursos alcanzaron los 113.836 millones, suponiendo los impuestos el 85,2% del total. Los gastos, en cambio, crecieron a un ritmo muy inferior, del 2%, hasta los 137.323 millones.

Repunte del IVA

Los ingresos tributarios continúan creciendo a un ritmo sostenido, empujados por la mejora del empleo, la subida de pensiones y salarios públicos y el efecto de la inflación, que lleva meses en cotas elevadas y que en junio alcanzó el 10,8%. La Agencia Tributaria, que ha publicado hoy su informe de recaudación relativo al mes de junio, apunta a un incremento de los ingresos del 18,3% en el primer semestre con respecto al mismo periodo de 2021, hasta los 107.009 millones. Si solo se considera el sexto mes del ejercicio, el alza ha sido del 10,9%.

El organismo detalla que el impuesto sobre la renta (IRPF) ha sido el más dinámico entre los impuestos directos, “por el aumento de la masa salarial y de pensiones y por el consecuente incremento del tipo efectivo”. Asimismo, el impuesto de sociedades continúa teniendo una aportación relevante “por la caída de las devoluciones realizadas correspondientes al ejercicio 2020″, pero es el IVA el que más protagonismo ha tenido en el incremento de la recaudación por el empujón de la inflación y la mejora del consumo. “La escalada de los precios y la tendencia alcista del consumo han mantenido al IVA como la figura principal con mayor ritmo de aumento en lo que va de año y, por tanto, con una mayor aportación al crecimiento agregado”, señala la Agencia Tributaria.

Es más. Los cambios normativos y de gestión, sobre todo los relacionados con los descuentos en los impuestos eléctricos ―rebaja del IVA y del impuesto eléctrico, suspensión del gravamen a la generación―, arrojaron una pérdida potencial de ingresos de 2.999 millones. Sin ellos, el crecimiento en el semestre hubiese sido del 21,6%. La supresión del impuesto de generación es la medida que más impacto tuvo. “En relación al mes pasado, se estima una pérdida adicional de ingresos de casi 300 millones, 148 millones en el Impuesto Especial sobre la electricidad y 143 millones en el IVA. Desde el mes de enero, estas medidas han restado 3.987 millones a la recaudación, y si se tiene en cuenta todo el periodo desde que comenzaron, la pérdida se eleva a 5.592 millones”, desglosa la Agencia.

Los ingresos por IVA fueron los que más tiraron de la recaudación en el semestre, con un alza del 22,1% hasta los 43.115 millones. También el impuesto de sociedades brindó ingresos un 10,6% superiores a 2021 (8.458 millones), gracias a que el importe de las devoluciones fue menor y a una mejora en los pagos fraccionados del primer trimestre, en línea con el aumento de los beneficios y la base imponible. Los ingresos por IRPF alcanzaron los 46.444 millones en el acumulado del año, un repunte del 15,8%. La mejora se debe sobre todo al crecimiento de las retenciones de las grandes empresas, que pese a ralentizarse avanzaron un 11% en el semestre ―por la creación de empleo y el aumento de los salarios medios, que eleva el tipo efectivo― y de las pensiones, con un incremento estabilizado alrededor del 17%.