Los centros comerciales reabrirán con menos aforo, compras online y códigos QR

Espacios que fueron pensados para hacer compras durante horas, tomar algo en una terraza, ir al cine, sentarse en un banco y encontrarse con amigos son ahora lugares vacíos que en mucho tiempo no podrán retomar su actividad. La pandemia obliga a los centros comerciales a reinventarse por completo. Los responsables de Diagonal Mar, en Barcelona, han explicado este lunes cómo pretenden abrir las instalaciones a partir de la fase dos de la desescalada, que en la capital catalana se prevé para la segunda semana de junio si los indicadores sanitarios lo permiten. La consigna es reducir aforo, extremar las medidas, priorizar el comercio online y aumentar el personal para controlar los movimientos de los clientes.

La Asociación Española de Centros y Parques Comerciales destaca que el conjunto de los centros está empezando a preparar medidas para la apertura, aunque los detalles dependerán en cada caso de la entidad gestora.

En el caso del centro de Diagonal Mar solo se dejará entrar al 40% de su aforo habitual. Los clientes se encontrarán con marcas en el suelo que indican las distancias de seguridad, y con un mostrador donde se les suministrará una mascarilla y gel desinfectante. En el interior de las tiendas el aforo no superará las diez personas, que tendrán que hacer cola en unas cintas separadoras. Los espacios para descansar estarán precintados. Y los bares, las terrazas y restaurantes tendrán que cumplir con las medidas de aforo que estén vigentes en cada fase. También se evitarán las interacciones con los camareros mediante una aplicación y códigos QR para pedir la comida y la bebida.

“Estamos intentando hacerlo lo más humano posible, sin alarmismo pero informando y contando con el sentido común de los clientes”, ha explicado Joaquín Martos, director de Diagonal Mar, gestionado por CBRE. Esta consultoría inmobiliaria gestiona 28 centros comerciales en España, en los que pretende implementar las mismas medidas de seguridad. Además de instalar dispensadores de gel en todas las zonas, se contratará hasta un 25% más de personal para controlar las aglomeraciones de clientes. En los lavabos, por ejemplo, habrá siempre un trabajador para dar paso a los clientes.

La crisis ha obligado a los centros comerciales a dar otra vuelta de tuerca, después de un tiempo en transformación ante el cambio de hábitos de los clientes y el auge del comercio por Internet. El director de Diagonal Mar no ha especificado cuáles son las previsiones de pérdidas para este año ni el importe de la inversión realizada para llevar a cabo las medidas de seguridad, aunque sí ha destacado que estas “han llegado para quedarse”. En este sentido, los centros reforzarán su función de punto de recogida para compras en línea, y también, ante la caída de ventas prevista, Martos ha reconocido que están iniciando conversaciones con los operadores para revisar los alquileres.

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