El escándalo de las cuentas falsas nubla los resultados de Wells Fargo
Los bajos tipos de interés exprimen el margen de beneficio de los grandes bancos de Wall Street
La crisis de Wells Fargo por el fraude de las cuentas falsas no se va a resolver con la salida de John Stumpf, que esta semana anunció su dimisión tras un mes bajo una intensa presión. El escándalo nubló el rendimiento del cuarto mayor banco de Estados Unidos, que fue mejor de lo esperado pese a que registró una ligera caída del beneficio. La persistencia de los bajos tipos de interés tampoco ayuda.
Wells Fargo cerró la cuentas en septiembre con una ganancia neta de 5.640 millones. Es un 3% menos que en el mismo periodo de 2016. El grupo financiero con sede en San Francisco elevó los ingresos a 22.300 millones, lo que representa un incremento del 2%. El escándalo no parece en este momento que esté afectando a la apertura de cuentas ni en los préstamos, que subieron un 6% en el trimestre.
Timothy Sloan, el nuevo consejero delegado, aseguró que está “profundamente comprometido” con restaurar la reputación del banco entre los clientes y de los inversores. “Sabemos que es algo que llevará tiempo y mucho trabajo”, admitió. Wells Fargo fue sancionada con 185 millones porque sus empleados crearon dos millones de cuentas falsas para cumplir los objetivos de venta. Realizó 5.300 despidos.
JPMorgan Chase también registró una caída en el beneficio. El mayor banco por activos del país ganó 6.290 millones de dólares el pasado trimestre, casi un 8% menos que en el mismo periodo del año anterior. De nuevo, su rendimiento se ve lastrado por los bajos tipos de interés. Pese a todo, el resultado mejor del esperado por Wall Street. Los ingresos los elevó un 8% en el año, a 25.510 millones.
Jamie Dimon, su consejero delegado, fue de los pocos ejecutivos que salió en defensa de John Stumpf en pleno fervor del escándalo y calificó de injusta que la retórica que se está utilizando en Washington con este, porque alimenta el sentimiento contra Wall Street. Su banco, en todo caso, está realizando un análisis de sus prácticas de ventas comerciales para certificar que no se están cometiendo abusos.
“No hemos detectado ningún problema sistémico”, aseguró la directora financiera de la entidad, Marianne Lake, en la conferencia con analistas. También garantizó que el régimen de incentivos a los empleados está diseñado para premiar “la buena conducta” en la venta de productos a los clientes. Sin embargo, Lake admitió que es “imposible que no haya defectos” en el sistema.
Citigroup cerró el grupo de grandes bancos de Wall Street que arrancó la temporada de resultados, con una contracción del beneficio. En su caso ganó 3.840 millones de dólares, frente a 4.290 millones hace un año. Los ingresos también cayeron, a 17.760 millones. Como sus rivales, cita los bajos tipos de interés con un punto de vulnerabilidad en el margen de beneficio de sus préstamos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.