La creación de empleo se acelera en EE UU y agita el debate de los tipos
Hay 280.000 nuevos ocupados. El paro sube una décima, al 5,5%, porque más gente busca empleo
El mercado laboral en Estados Unidos registró 280.00 nuevos ocupados el mes de mayo. Es un ritmo mejor del que esperaba Wall Street y supera los 221.000 de abril. La tasa de paro, entretanto, sube una décima, al 5,5%, porque hay más gente buscando trabajo. El indicador se publica a menos de dos semanas de que se celebre la próxima reunión de la Reserva Federal, la primera oportunidad que tiene el banco central estadounidense para iniciar el proceso de normalización de la política monetaria.
Los analistas están obsesionados con el que puede ser el primera alza de tipos de interés en nueve años, pese a que se decanten por la cita de septiembre como la más probable. El precio del dinero lleva estancado en el 0% desde diciembre de 2008. El indicador de empleo era, por tanto, determinante para tener más claro lo que anunciará la Fed el 17 de junio. Se anticipaban 225.000 nuevos empleos y que el paro se mantuviera estable. La lectura de abril se mantuvo más o menos sin cambios y la de marzo se mejoró a 119.000 ocupados.
El dato confirma, por tanto, que la economía repuntó con la llegada de la primavera. El ritmo de contratación se coloca así al nivel de los 281.000 empleos de media que se registraron en el segundo semestre de 2014. Es decir, la primera lectura de mayo estaría dentro de lo que se considera un ritmo “sólido”. Si se mantiene este avance, sería suficiente para que el mercado laboral vaya acercándose a la situación de pleno empleo que quiere ver la Fed antes de subir tipos. Además, se observa un ligero incremento de los salarios, del 2,3%.
El paro está ya al nivel previo a la recesión. Pero otra cosa distinta es si aguantará el alza de tipos. El subempleo se acerca al 11% cuando se cuentan los 6,7 millones de estadounidenses forzados por las actuales condiciones a trabajar a tiempo parcial y los 1,9 millones apartados del mercado laboral. El índice de participación subió una décima, al 62,9%, porque 397.000 personas volvieron a buscar trabajo. Aún así, sigue al nivel de tres décadas. El paro de larga duración, además, afecta al 28,6% de los desocupados, otro punto de vulnerabilidad.
Momento del alza
El dato, por tanto, no hace más que animar el debate sobre cuál es el momento adecuando para subir tipos. Janet Yellen, presidenta de la Fed, no da fechas pero si sugiere que el primer paso será simbólico e insiste además en que no hay que preocuparse por la progresión después del primer incremento, porque el avance de la normalización será lento, gradual y estará muy condicionado por los datos. Es más, todo indica que el punto de equilibro será más bajo de lo normal y se tardará al menos tres años en llegar.
El indicador de empleo se conoce un día después de que Christine Lagarde urgiera desde el Fondo Monetario Internacional que se aplace el alza de tipos varios trimestres, hasta que quede claro que las condiciones económicas en EE UU se consolidan. El temor del organismo es que se dé el paso demasiado pronto y eso cree una volatilidad en los mercados que acabe forzando a la Fed a dar un paso atrás para corregir. Por eso lo ve más adecuado entrado 2016. Dijo este retraso es también un seguro frente al riesgo de deflación.
La lectura que se hace del mercado laboral, por tanto, es que las cosas no están tan mal como se pudiera pensar o temer. El último Libro Beige anticipa que la economía crecerá a un ritmo moderado tras el atragantón a comienzos de año. Pero tampoco está tan claro que el ritmo de creación de empleo en mayo sea suficiente para llevar a la Fed a subir tipos este mes. Así gana fuerza la cita de septiembre frente a la de octubre o diciembre. Yellen ya ha dicho que necesita estar confiada antes de actuar, tanto del lado del empleo como de la inflación.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.