El BBVA revela que sufrió pérdidas de 1.618 millones en España en 2014

La caída de la prima de riesgo española y la subida de precio de los bonos en todo el mundo ha provocado que se disparen las plusvalías latentes en la cartera de deuda del BBVA, según los datos que publica la entidad en la memoria de sus cuentas anuales, que la empresa ha puesto a disposición de sus accionistas. En total, entre deuda y acciones, y restando las minusvalías latentes, el banco tiene plusvalías sin realizar de 4.863 millones.

La mayor parte de las plusvalías se concentran en deuda del Estado español (y otras administraciones españolas). Son 2.290 millones de plusvalía por solo 55 de minusvalías en la cartera de deuda pública contabilizada como activos disponibles para la venta. También destacan las plusvalías en la cartera de deuda mexicana. En total, las plusvalías latentes en valores de deuda disponibles para la venta suman 4.181 millones, a los que restar 566 millones de minusvalías. El año pasado, el banco tenía en esta deuda 1.964 millones de plusvalías por 704 de minusvalías.

En cuanto a la cartera de acciones, el banco tiene plusvalías latentes de 1.356 millones por pérdidas sin realizar de 108 millones, cuando el año pasado solo tenía 109 millones a favor por 57 en contra. El salto se debe sobre todo a las plusvalías en la cartera de acciones de empresas extranjeras (1.235 millones), lo que se explica por las ganancias en el chino Citic, parte de las cuales ya ha empezado a materializar en el arranque de 2015.

En total, las ganancias y pérdidas por valoración se han triplicado de 1.653 a 4.841 millones. Si la cifra se compara neta de impuestos, de importes transferidos a resultados y de otros ajustes y reclasificaciones, el saldo se multiplica por más de cuatro, de 851 a 3.816 millones.

Fuertes pérdidas en España

El informe anual del BBVA también revela que el resultado real del grupo en España es de pérdidas antes de impuestos de 1.618 millones. En la presentación de sus cuentas, el banco publicó sus resultados por segmentos de negocio, destacando los beneficios de su negocio bancario español y la reducción de las pérdidas de su negocio inmobiliario. Sin embargo, desde este año, los bancos están obligados a comunicar al Banco de España su resultado real por países y el BBVA ha sido el primero en hacerlo.

Esas cifras muestran que el resultado antes de impuestos del BBVA en España fue de pérdidas de 1.618 millones, siendo España y Portugal (57 millones) los únicos países donde el banco está en pérdidas. En España se concentran las pérdidas del centro corporativo. La información del banco muestra que del total de 3.980 millones de beneficio antes de impuestos y minoritarios, México aporta 2.497 millones; EE UU, 544; Perú, 499, Argentina, 418; Colombia, 398, y Venezuela, 396.

Las sociedades españolas que generan mayores pérdidas son las inmobiliarias. Anida Grupo Inmobiliario tuvo pérdidas de 471 millones; Anida Operaciones Singulares perdió 375 millones, y Anida Desarrollos Inmobiliarios, otros 35.

El reparto de los impuestos

En cuanto al impuesto de sociedades, de los 898 millones de gasto contabilizado al respecto el año pasado, 617 millones corresponden a México, mientras que en EE UU, Perú, Colombia, Argentina y Venezuela la cifra se sitúa algo por encima de los 100 millones en cada uno de ellos. En España, sin embargo, el banco lo que se apuntó fue un ingreso de 350 millones, por los impuestos a ahorrarse en el futuro derivados de las pérdidas del año pasado. Si lo que se mira no es el gasto atribuible al ejercicio sino la corriente de pagos de caja, en total el banco desembolsó 1.479 millones por el impuesto de sociedades, de los que solo 20 millones, el 1,4%, fueron en España.

De esa información no queda claro el motivo de la salida de caja cuando el banco declara en su conjunto ingresos en España por el impuesto de sociedades. En otro apartado de la memoria se dice que en 2014, como consecuencia de la actuación inspectora de las autoridades fiscales, se incoaron actas de inspección hasta el ejercicio 2009 inclusive. El banco señala que todas esas actas fueron firmadas en conformidad, pero no indica su cuantía.

El volumen de activos fiscales garantizados, de los que el Estado respondería en caso de que no pudieran ser utilizados para ahorrar impuestos ha aumentado en un año de 4.373 a 4.881 millones. Esas cifras corresponden a España y Portugal y en su mayor parte (3.140 millones) provienen de provisiones para insolvencias que no se dedujeron al dotarse porque la pérdida no se había materializado. El resto (1.741 millones) tienen su origen en compromisos por pensiones.

Las prejubilaciones aumentan hasta 1.706

La entidad también explica que llevó a cabo 1.706 prejubilaciones de empleados en 2014 en España, un 62% más que las 1.055 de 2013 y casi el triple que las 633 de 2012. Los compromisos por prejubilaciones crecieron de 2.634 a 2.803 millones el año anterior. Esos compromisos incluyen tanto retribuciones como las aportaciones a los fondos externos de pensiones a pagar durante el periodo de prejubilación.

La plantilla media del grupo BBVA se ha reducido en 3.360 personas, hasta los 109.239 empleados. Tras la reducción de plantilla en España por las prejubilaaciones, el número de empleados en México ya supera al de las sociedades bancarias españolas del grupo. En l información facilitada al Banco de España por las nuevas exigencias se señala que de los 105.961 empleados a tiempo completo, México es el primer país con 37.149 emleados, seguido por España, con 28.033, y Estados Unidos, con 10.428.

Menos pérdidas por la compra de Garanti

En la memoria de la entidad también se explica que el impacto negativo en el beneficio por la compra de una participación adicional del 15% en el banco turco Garanti puede ser menor de lo previsto. El banco dijo inicialmente que ese impacto negativo sería de 1.500 millones, pero ahora ha realizado una actualización de la estimación de dicho impacto y lo rebaja a 1.250 millones, la mayor parte por depreciación de la lira turca. El banco resalta que “ese impacto en los resultados no supondrá salida adicional alguna de caja”.

El informe anual también ofrece la radiografía más reciente del accionariado del banco. La entidad detalla su estructura accionarial a 31 de diciembre de 2014, cuando contaba con 960.397 accionistas, frente a los 974.395 de un año antes. Los datos muestran que el 69,5% del capital se concentraba en los 6.562 accionistas que tenían más de 45.000 acciones cada uno. En cambio, los 243.000 accionistas con 450 acciones o menos solo controlaban el 1,2% del capital.

El banco también señala que continúa aumentando el porcentaje del capital en manos de accionistas extranjeros. A cierre de 201, los no residentes controlaban ya un 53,9% del capital del banco, frente al 52,3% de 2013.

Cae el crédito a las pymes

Las cuentas del banco muestran que buena parte de la reducción del crédito durante 2014 se concentró en las pymes y empresarios individuales, donde el saldo pasó de 47.636 a 39.621 millones, y en el crédito a la compra de vivienda, mientras aumentaba el crédito a las Administraciones públicas, a otras instituciones financieras y a las grandes empresas.

El banco ha logrado rebajar su exposición crediticia al sector promotor de 13.505 a 10.986 millones y también el volumen absoluto de créditos dudosos (7.418 millones) y subestándar (981 millones) al sector, aunque parte de esa reducción se deba al aumento de fallidos. Lo que no baja es el volumen bruto de activos adjudicados, que pasa de 13.695 a 13.753 millones, sobre todo por el tirón en la ejecución de hipotecas a particulares. Una mayor cobertura con provisiones de los inmuebles que se ha quedado el banco por impago permite que el valor contable neto baje de 6.624 a 6.376 millones, de los que 1.843 corresponden a suelo.

El BBVA aumentó de 118 a 165 millones el importe de los créditos concedidos a clientes para la compra de inmuebles de la entidad, con un porcentaje medio financiado del 78% del precio de venta. A cierre de año, el banco tenía sin reconocer en su cuenta de resultados 22 millones de beneficios logrados por la venta de activos financiados con créditos del banco.

Las filiales en las Islas Caimán

En su informe de gestión, el banco que preside Francisco González explica que mantiene su política de reducción de la presencia en paraísos fiscales. Desde 2007 hasta 2014 ha eliminado 46 establecimientos permanentes en centros financieros off shore.

El grupo mantiene dos sucursales en las Islas Caimán que se dedican a banca corporativa. La dependiente del BBVA España tiene 1.154 millones en créditos y 867 millones en depósitos y la dependiente de BBVA Compass (EE UU) tiene 150 millones en depósitos.

Entre la información contable sobre filiales aparece el precio pagado por el 100% de Madiva Soluciones, una start up española especializada en procesamiento masivo de datos y computación en la nube: el precio pagado por el 100% del capital fue de 9 millones de euros.