La crisis internacional desacelera las exportaciones de América Latina

La crisis internacional ya no es solo un problema de las economías desarrolladas. Con la UE en tasas de crecimiento cercanas a cero, EE UU con una recuperación muy débil y vulnerable y China frenando su extraordinario dinamismo, el comercio exterior de América Latina profundizará este año la desaceleración que experimentó a partir del segundo semestre de 2011, según el informe Panorama de la inserción interacional de América Latina y el Caribe 2011-2012 que la Cepal ha presentado este jueves en México DF.

La Cepal (Comisión Económica para América Latina y el Caribe) no es optimista sobre el futuro a corto plazo de las economías industrializadas. Según su secretaria ejecutiva, Alicia Bárcena, encargada de presentar el informe, la zona euro, si no consideramos a Alemania, vuelve a estar en recesión y la recuperación en EE UU es la más débil desde los años 60. Con todo, el problema podría agravarse si en el Congreso de Washington no se alcanza un acuerdo fiscal y se llega al denominado fiscal cliff, unos ajustes automáticos del presupuesto que llevarían a su economía a contraerse nada menos que el 2,9% en el primer semestre de 2013 y el 0,3% en todo el año y que harían aumentar el paro del 8% al 9,1%.

Con este panorama, los países emergentes seguirían siendo el motor de la economía mundial y aportarían dos tercios del crecimiento, pero con menor dinamismo que en el quinquenio 2003-2008. Un aspecto clave para ellos es si continuará el boom de los precios de los productos básicos. La Cepal espera una reducción del 2,5% en el índice de precios de estos productos en 2012 y del 1,9% anual entre 2013 y 2015. Incluso en el escenario más pesimista, esto significa que se mantendrían por encima de los de 2009, pero incluso en el escenario más optimista, el crecimiento del valor previsto de las exportaciones regionales entre 2013 y 2015 no superaría e 10,5% anual, comparado con el 20% entre 2005 y 2011.

En cuanto al comercio, principal canal de transmisión de la crisis, el valor de las exportaciones en América Latina y el Caribe crecerá un 4% y el de las importaciones un 3%, pero la desaceleración será notable, comparado con el 23% y 22% respectivamente de 2011. Ese frenazo ha afectado a los intercambios con todos los principales socios comerciales de la región, pero sobre con todo con la Unión Europea, que cayeron el 5% en el primer semestre de 2012. Y esta tendencia se mantendrá en los próximos años, según la Cepal: aumento del valor total de las exportaciones pero a menores tasas que en la segunda mitad de la década pasada.

¿Cuáles son las debilidades que presenta el comercio latinoamericano? Cepal subraya varias: los bajos niveles de integración interregional y de integración productiva, el bajo porcentaje de empresas exportadoras sobre el total (menor al 2% en casi todos los países), la concentración de las exportaciones en un puñado de empresas que concentra el 70% de los envíos totales y el predomino de las compañías que venden un solo producto a un solo mercado.

Ante este panorama, Cepal recomienda mayor y mejor integración regional y reforzar los vínculos con otras zonas en desarrollo, en particular con Asia-Pacífico, ya que el dinamismo económico se está trasladando del Atlántico al Pacífico. También, promover procesos de innovación, competitividad e internalización de las empresas e incorporar a las pequeñas y medianas al proceso exportador. El desafío es extraordinario porque para 2017 los países en desarrollo representarán los dos tercios del comercio mundial y antes de 2020 el comercio Sur-Sur sobrepasará al Norte-Norte.