"Nos enfrentamos a un año crítico"

La presidenta de la Federación Nacional de Ayuda a Drogodependientes (Fenad), Carmen Cacabelos, señala que la atención a pacientes con trastornos adictivos "está ante un año crítico" motivado por los recortes en las partidas destinadas a la atención de pacientes drogodependientes que se suman a los que ya venían asumiendo en ejercicios anteriores.

"Llevábamos años de mucho trabajo para poder ofrecer una asistencia digna pero todo lo que conseguimos puede perderse en poco tiempo si continúan reduciendo recursos de esta manera", sentencia Cacabelos. Desde la Fenad lamentan que los recortes ya se hayan cobrado el cierre de programas de prevención consolidados y advierten que con la reducción en los convenios y los retrasos de varios meses en los pagos de la Xunta muchas entidades pueden llegar a ver su viabilidad en entredicho.

"Todo lo que logramos puede perderse en poco tiempo"

Además de la escasez de ayudas, la Asociación Galega de Profesionais das Drogodependencias alerta de que desde hace un año el Gobierno gallego ha eliminado los convenios que firmaba con los centros que ofrecen servicios de prevención y apoyo a familiares drogodependientes para consignar una partida única. Según los profesionales, esta partida gestionada por la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) no detalla los fondos concretos que se le conceden a cada entidad y tampoco especifica cuánto se destinará a las asociaciones para proyectos de prevención del VIH y cuánto para la atención a toxicómanos.

"Antes, la forma de asignar las ayudas permitía a los centros planificar su actividad económica desde principios de año; ahora, con este nuevo modelo muchas entidades se encuentran en una situación de incertidumbre a la hora de plantear sus presupuestos porque no saben con cuánto dinero van a contar ni en qué mes lo van a recibir", asegura Ramón Mouriño, uno de los miembros de la directiva de esta asociación.

Por otra parte, la entidad que representa a los profesionales en la atención a toxicómanos denuncia también el estancamiento en materia legislativa en el que se encuentra Galicia en cuestión de trastornos adictivos. "El anterior plan gallego sobre drogas terminó en el año 2009, el actual entró en el Parlamento en 2010 con un año de retraso y a día de hoy no sabemos si está pendente de tramitación o si está archivado en un cajón", explica Mouriño.