La limpiadora niega querer enriquecerse a costa de DSK
La supuesta víctima de abusos del exjefe del FMI no descarta una demanda civil
La limpiadora del hotel Sofitel que alega que Dominique Strauss-Kahn abusó de ella sexualmente en una suite negó ayer haber dicho que buscara el dinero del político francés en una conversación telefónica mantenida con un conocido suyo que está en prisión en Arizona y que fue grabada por los fiscales. Ese intercambio telefónico se produjo después de la detención del político y en lengua fulani, propia del oeste de África, de donde procede la limpiadora, Nafissatou Diallo, de 32 años, nacida en Guinea. Y, al parecer, la conversación fue mal traducida, según los abogados de la mujer.
Diallo por primera vez compareció ayer en público, en una iglesia de Brooklyn, vestida de traje negro y con gesto grave, dentro de una campaña orquestada por sus abogados para contrarrestar los ataques de la defensa del exdirector gerente del FMI, que la han acusado de mentir y querer enriquecerse con este caso.
Diallo busca despejar las dudas sobre su integridad que ha planteado la defensa
Aquella conversación telefónica con Amara Tarawally, su conocido, condenado por tráfico de drogas, fue malinterpretada y mal traducida, aseguran sus abogados. En una reunión con los fiscales, mantenida el miércoles, Diallo repasó toda la grabación y tradujo y explicó todas y cada una de las frases que pronunció. "Las frases atribuidas a Diallo de que 'tiene mucho dinero' y 'sé lo que debo hacer' no están en esa cinta, según un intérprete de fulani que colabora con la oficina del fiscal del distrito", asegura Ken Thompson, letrado de la supuesta víctima. Los abogados ya han anunciado que si la fiscalía desestima todos los cargos no dudarán en presentar una demanda civil.
Después de conceder dos entrevistas de las que se ha hablado mucho, a la revista Newsweek y a la cadena ABC, Diallo acudió ayer a una iglesia cristiana de Brooklyn a dar las gracias a la ciudadanía neoyorquina, según explicaron sus abogados. "Estoy aquí para contarle a todo el mundo por lo que he pasado estos últimos meses", dijo. "He decidido salir a la luz porque la gente me ha dirigido insultos... He tenido que venir a deciros que mucho de lo que se ha contado de mí no es cierto".
Los abogados de DSK han intentado acabar con el caso poniendo en duda la honorabilidad de Diallo. Aparte de algunas inconsistencias en su relato de los hechos, se han referido a la mencionada conversación con su conocido y al hecho de que exagerara la dureza de sus condiciones de vida en Guinera para lograr una autorización de visado a EE UU. El tabloide The New York Post, propiedad de Rupert Murdoch, la acusó en una exclusiva de portada de ser "una puta"
[hooker, en inglés].
Diallo acusa a Strauss-Kahn de haberla agredido sexualmente y de haberla forzado a practicarle una felación, el 14 de mayo, antes de dejar el hotel para viajar a París. Fue arrestado en el avión.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.