La segunda corona barcelonesa también suspende en contaminación

A Cataluña se le amontonarán las sanciones de la UE por excesiva contaminación: la Generalitat añadió ayer otra área problemática a la elevada polución que arrastra Barcelona. La segunda corona metropolitana, zona entre el Vallès y el Baix Llobregat en la que residen 1,4 millones de habitantes, también rebasó en 2010 el límite de contaminación en dióxido de nitrógeno (NO2) que fija la UE para evitar riesgos en la salud de las personas. "No estamos bien", asumió la directora de Calidad Ambiental de la Generalitat, Assumpta Ferran, en la presentación de los datos de polución del año pasado.

Granollers, Sabadell, Terrassa, Mollet y Martorell, entre otras ciudades, registraron entre 41 y 54 microgramos de NO2 rebasando el máximo de 40 microgramos exigido por la Unión Europea. Barcelona, por su parte, oscila entre los 41 y los 65 microgramos.

Las partículas contaminantes mejoraron en todas las zonas, pero ni la mejor noticia se antoja duradera: Barcelona cumplió con los niveles de partículas que exige la UE por primera vez desde 2005. "Aunque sea por casualidad", puntualizó Ferran. "El año pasado fue lluvioso y descendió la actividad económica. Cuando esta remonte, los niveles volverán a subir". La directora de Calidad Ambiental avisó que la Generalitat incumplirá la ley europea sobre contaminación "durante años". Ello supone que Cataluña irá acumulando sanciones por transgredir la normativa, el monto de las cuales deberá fijarlo el Tribunal de la UE.

Ferran insistió en que la Generalitat solicitará prórrogas a Bruselas para evitar sanciones. La UE prevé eximir del cumplimiento de la ley hasta cinco años. Por el momento, ha denegado las peticiones de Cataluña señalando que esta carece de un plan efectivo contra la contaminación.

El peor perjuicio será para la salud de los habitantes: las partículas y el NO2 son gases irritantes que agravan y causan enfermedades cardiorrespiratorias. Incumplir los niveles que fija la UE incide en unas 3.500 muertes al año en el área barcelonesa, advierten varios estudios epidemiológicos.Los malos datos quedaron retratados por el anticiclón que acecha Barcelona: mientras la Generalitat presentaba los datos, la ciudad batía récords de contaminación. El episodio anticiclónico excedió durante tres horas el umbral de alerta de 200 microgramos de NO

2, que según la normativa de la UE solo puede rebasarse 18 veces al año. En todo 2010 no se superó este límite en ningún punto de Cataluña. El nivel de NO2 alcanzó los 262 microgramos en plaza Gal·la Placídia, zona que acabó con una media diaria de 136 microgramos, tres veces más de lo permitido.

"Ni el Ayuntamiento de Barcelona tiene planes de emergencia ni la Generalitat puede reducir la polución", lamentó Ferran. En este sentido, la Generalitat ha solicitado al Gobierno central que establezca un mecanismo para medir el nivel de contaminación que emiten los vehículos para que estos puedan ser corroborados en la ITV. "Debemos empezar a trabajar conjuntamente con los Ayuntamientos", señaló Ferran.

Expertos consultados por este diario aprobaron la idea, sorprendidos de que esta se fragüe tras seis años incumpliendo los niveles legales de contaminación. La elevada polución está causada en el 80% por el tráfico, pero Ferran insistió en descartar la aplicación de cualquier tipo de restricción para los coches en el casco urbano.