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El brote de legionela causa una tercera muerte pese a ir remitiendo

La nueva víctima tenía 73 años y llevaba una semana en cuidados intensivos

Elena G. Sevillano

El brote de legionelosis que tiene en vilo a la Consejería de Sanidad desde que hace tres semanas empezaron a llegar a los hospitales los primeros casos sumó ayer otra víctima. Un hombre de 73 años falleció en el hospital Fundación Jiménez Díaz. Llevaba ingresado en la unidad de cuidados intensivos desde la semana pasada y tenía antecedentes de patología respiratoria grave, informó un portavoz de Sanidad.

Ayer se conoció también un caso nuevo, con lo que ya son 40 las personas que han enfermado por legionela. De ellas, tres han fallecido. Un hombre de 55 años fue la primera víctima, el día 19. Otro, de 92 y suegro de Esperanza Aguirre, falleció el día 25. Quedan ingresados en los hospitales 13 afectados, después de que se haya dado de alta a 20. Cuatro no necesitaron quedarse en el hospital y siguieron el tratamiento con antibióticos en su casa.

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El brote podría estar remitiendo, según avanzaron el viernes pasado a EL PAÍS fuentes sanitarias. Ese día se dieron a conocer cinco casos nuevos, pero solo uno había iniciado la sintomatología esa semana. Ayer, el portavoz de Sanidad aseguró que en las últimas 72 horas no había aparecido ningún afectado nuevo. El último se confirmó ayer, pero fue detectado la semana pasada.

Los inspectores de Salud Pública tienen identificados dos clusters, dos agrupaciones de casos de legionelosis que coinciden en una misma área. Es decir, que buscan dos focos diferentes, uno en Retiro y el otro en Centro, según confirmó el director de Atención Primaria, Antonio Alemany.

La legionela puede entrar en las vías respiratorias a través del aire, respirando aerosoles (gotas diminutas) que contienen una alta concentración de bacterias. Si provocan infección, puede desembocar en una neumonía (fiebre, tos seca, dificultad para respirar, etcétera). Hay personas que ni se enteran de que están afectadas y otras, las mayores, con problemas respiratorios, inmunodeprimidas, las fumadoras, en las que el contagio puede evolucionar mal.

Una bacteria que se transmite por el aire

- La Legionella es una bacteria que vive en los hábitats acuáticos. Desde allí puede colonizar las redes de abastecimiento de las ciudades y llegar a torres de refrigeración u otras instalaciones donde hay agua estancada a temperatura templada. En esas condiciones, se multiplican.

- Si las bacterias se trasladan por el aire en aerosoles (gotas diminutas) pueden ser inhaladas, llegar a los pulmones y comenzar a la enfermedad. No se contagia de persona a persona ni bebiendo agua contaminada.

- Los síntomas de la enfermedad son los de una neumonía: tos seca, dificultad para respirar y fiebre. En el hospital, una sencilla prueba de antígeno en la orina determina si la neumonía la ha provocado la bacteria. Se trata con antibióticos.

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Sobre la firma

Elena G. Sevillano
Es corresponsal de EL PAÍS en Alemania. Antes se ocupó de la información judicial y económica y formó parte del equipo de Investigación. Como especialista en sanidad, siguió la crisis del coronavirus y coescribió el libro Estado de Alarma (Península, 2020). Es licenciada en Traducción y en Periodismo por la UPF y máster de Periodismo UAM/El País.

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