"Hay otros 'velázquez' por descubrir"
"Así lo demuestran las fuentes históricas", dice el historiador Jonathan Brown - Antonio Bonet Correa pide un congreso sobre 'La educación de la Virgen' - "Es una obra esencial en la formación de Velázquez", asegura Benito Navarrete
La noticia del descubrimiento de una obra inédita de Diego Velázquez, La educación de la Virgen, en los sótanos del museo de la Universidad de Yale, fue recibida ayer en el mundo del arte con tantas dosis de indisimulada satisfacción como de irremediable cautela. La sensación generalizada tras recabar la opinión de los expertos es que, a simple vista, nadie duda de la autoría del genio sevillano. Pero, en general, las autoridades en la obra del autor de Las meninas piden paciencia hasta conocer las opiniones de la internacional de expertos que, en los próximos días, intentarán contemplar el cuadro con sus propios ojos.
Y no solo no existen casi dudas acerca de la autoría de La educación..., sino que una autoridad indiscutible en este terreno como Jonathan Brown, está convencido de que hay más obras inéditas de Velázquez aún por descubrir. "Así lo indican las fuentes históricas en las que se habla de cuadros que hoy en día se desconocen".
Benito Navarrete, del Centro Velázquez: "hay que exponer la obra en El Prado"
El mundo académico exhibe tanta satisfacción como cautela
Otro experto en la materia, como es el caso de Antonio Bonet Correa, director de la Academia de Bellas Artes de San Fernando, llegó ayer a proponer la celebración de un congreso internacional en el que se pueda debatir en torno a la autoría del cuadro de Velázquez localizado en Yale y también sobre las atribuciones del arte en general.
El hallazgo de este nuevo Velázquez es obra de John Marciari, conservador jefe de arte europeo del Museo de Bellas Artes de San Diego. Ayer, desde primera hora de la mañana, se vio desbordado por los medios de todo el mundo. Satisfecho por la repercusión que ha tenido su investigación, manifestó a este periódico que su deseo sería que el cuadro pudiera ser expuesto en el Museo del Prado, de acuerdo con Yale, y que entonces opinaran otros expertos.
"No dudo de que siempre van a aparecer escépticos, pero he dedicado siete años de mi vida a este trabajo y, honradamente, pienso que he respondido a cada una de las múltiples incógnitas que se planteaban en torno a esta obra. Ahora ha llegado el momento de que el mundo lo conozca".
En su pormenorizado estudio, el profesor detalla y analiza el estilo, la técnica y la composición de la tabla para, finalmente, asegurar que el óleo fue pintado durante los primeros años de la carrera del pintor, en torno a 1617, y que es el descubrimiento más significativo que se ha hecho sobre la obra del artista en el último siglo.
Benito Navarrete, director del Centro Velázquez de Sevilla,profesor de la Universidad de Alcalá de Henares y discípulo del gran historiador del Arte y ex director del Museo del Prado Alfonso Pérez Sánchez, es de los que menos prevenciones tiene a la hora de catalogar el velázquez de Yale. Navarrete tiene, en efecto, escasas dudas y añade que esta obra presenta similitudes con La Inmaculada adquirida por la Fundación Abengoa el pasado año en Londres y sobre la que pendían dos autorías: Alonso Cano o Velázquez (ver recuadro).
Benito Navarrete considera que La educación de la Virgen es "una pintura muy importante", y añade: "Es esencial para la formación del primer Velázquez. Las primeras noticias sobre esa obra me llegaron hace cinco años. He podido ver los análisis fotográficos del detalle del cuadro y, aunque no lo he visto en directo, las dudas son pocas. Cuando Salvador Salort, alumno como yo de Pérez Sánchez, hizo su tesis sobre Velázquez, ya habló de La educación de la Virgen. Yo ya sabía hace tiempo que Marciari, una autoridad indiscutible en el barroco español, estaba investigando esta obra. Insisto en que tengo pocas dudas".
El protocolo que ahora debe seguirse con el cuadro es otro de los asuntos que preocupa a los expertos. Mientras que el director de la Academia de Bellas Artes habla de la necesidad de un congreso, sin especificar el lugar del encuentro, Navarrete opina que el óleo debería de ser trasladado hasta el museo del Prado, el templo en el que se encuentran las grandes obras del pintor, y que después de un tiempo de exposición en el que se pudieran contemplar los detalles, se pasara a elaborar las diferentes teorías. Pero, como recuerda Bonet, no siempre se actúa de la misma manera, aunque la negociación final será, sostiene, entre la Universidad de Yale y el Prado.
Similitudes sevillanas
Benito Navarrete, director del Centro Velázquez de Sevilla y autoridad en la pintura del autor de Las meninas, asegura que encuentra grandes similitudes entre los modelos de niña o jovencita que protagonizan La Inmaculada comprada para la Fundación Abengoa y La educación de la Virgen encontrada ahora en los sótanos del museo de la Universidad de Yale (EE UU). "La contemplación de las dos figuras desvela muchos misterios", opina Navarrete. "Y no solo los rostros son similares. También es casi idéntica la caída de los mantos pintada por el artista". La Inmaculada, que llegó a Sevilla con grandes dudas de atribución, resultó ser después una obra del joven Velázquez. Según adelantaba en su tesis el propio Benito Navarrete, el artista sevillano mostró ya gran talento en sus primeros trabajos, en un momento en el que todavía no se le hacía un seguimiento documental exhaustivo. "Por eso, solo los expertos son los que tienen ahora la última palabra".
El descubridor
- "No dudo de que aparecerán escépticos, pero he dedicado siete años de mi vida a este trabajo y, honradamente, pienso que he respondido a cada una de las múltiples incógnitas que se planteaban. Es el momento de que el mundo conozca esta obra": así mostraba ayer su satisfacción a este diario John Marciari. El conservador del museo de arte de San Diego fue quien localizó La educación de la Virgen en un almacén del museo de la Universidad de Yale.
Babelia
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