El Sergas niega que se filtrasen las preguntas de sus exámenes

"No creo en los milagros, pero sí en la capacidad de las personas". La directora de Recursos Humanos del Servizo Galego de Saúde (Sergas), Esperanza Fernández, apeló ayer a la valía individual para explicar las sorprendentes coincidencias en los resultados de las últimas oposiciones al departamento, en las que aspirantes vinculados familiar o laboralmente a la subdirectora general de la sección que organiza las pruebas, Rosario García, obtuvieron las mejores notas en exámenes a los que se presentaron entre 5.500 y 7.500 candidatos.

"De la investigación interna se constata que no se produjo ninguna ruptura en la cadena de seguridad ni ninguna incidencia en las fases de elaboración, custodia o impresión de las pruebas", alegó Fernández en una comparecencia en el Parlamento. Señaló, sin embargo, que hay una nueva investigación en marcha a cargo de la Dirección Xeral de Avaliación e Reforma Administrativa -que depende de la Consellería de Presidencia- y anunció que Sanidade ha pedido que en el nuevo Plan de Ordenación de Recursos Humanos que prepara la Xunta se refuercen los controles de las pruebas.

"No es la primera vez que trabajadores de la dirección o familiares suyos se presentan a un proceso selectivo del Sergas y aprueban", adujo la directora, que soslayó que lo chocante en el caso actual son las elevadas calificaciones entre este tipo de aspirantes. El diputado socialista José Manuel Lage Tuñas restó validez a las explicaciones de Fernández, y le afeó que considere "normal" la situación. También criticó duramente que tanto la propia subdirectora como la jefa de servicio presidiesen dos de los tribunales que puntuaron a los trabajadores en cuestión. "La alarma social va en aumento", dijo, y acusó al Gobierno autónomo de no tomar "decisiones contundentes que devuelvan la tranquilidad a los opositores".

Informe estadístico

La nacionalista Ana Luísa Bouza señaló, a su vez, que estos opositores están "bajo sospecha" y preguntó a la directora si planea pedir al Instituto Galego de Estadística un informe sobre las probabilidades matemáticas de que se den las coincidencias que han concurrido en este asunto, tal como se hizo el otoño pasado para el caso de las filtraciones en los grupos C1 y C2.

Durante la sesión también hubo tiempo para el cruce de reproches entre Lage y el diputado del PP Rosendo Fernández, para quien en el caso "no hay ningún tipo de indicio" que alimente las sospechas de irregularidades.