Racismo en Murcia
Vivimos en un mundo complejo, diverso, dinámico y en continuo cambio. Un mundo en el que van desapareciendo las fronteras y las desigualdades, en que somos de todos sitios y de ninguno. Sin embargo, la actitud de rechazo a los inmigrantes en la Comunidad de Murcia va en aumento, alentada por la crisis del ladrillo, por su modelo de desarrollo no sostenible, por el desarrollo de políticas sectarias y discriminatorias. Murcia está a la cabeza del racismo y la xenofobia de España. Y no se busca una solución, no se desarrollan políticas de integración ante este fenómeno. Se alienta la creación de guetos y se hace creer que la diversidad es un problema.
¿A qué temen quienes discriminan y rechazan? La diversidad nos favorece, nos enriquece, nos hace más grandes. Uno de los retos generacionales de este siglo XXI parte de la necesidad de ser sumamente responsables a la hora de tratar el fenómeno migratorio desde todos los ámbitos, pero principalmente desde el político.
Es necesario un esfuerzo mutuo de integración para acabar con la utilización xenófoba por parte de algunos medios y de ciertas medidas políticas.
La integración parte de un mayor conocimiento de la sociedad y de sus necesidades, de aumentar las políticas inclusivas donde todos y cada uno nos impliquemos.
La solución del racismo y la xenofobia en la zona de Murcia pasa por una región más cohesionada, justa y solidaria que rechace toda forma de discriminación y abogue por la consecución real de la igualdad de derechos para todos los que convivimos aquí.
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