Netanyahu da explicaciones a Clinton

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, llamó ayer por teléfono a la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, para rebajar la tensión existente entre ambos países por el anuncio israelí de construcción de nuevas viviendas en Jerusalén Este. Hillary Clinton esperaba explicaciones del jefe del Ejecutivo israelí, y éste se las dio anoche. "[Ambos] Han evocado acciones específicas que podrían adoptarse para mejorar la atmósfera del proceso de paz", informó en Moscú Philip Crowley, portavoz de la secretaria de Estado. "Vamos a examinar las respuestas del primer ministro [israelí]", añadió.

Al mismo tiempo, la Casa Blanca anunció que el enviado de Barack Obama para Oriente Medio, George Mitchell, viajará a Israel este fin de semana para reunirse con Netanyahu y con el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas. El viaje había quedado en suspenso tras el anuncio de construcción de nuevas viviendas en Jerusalén Este hecho público durante la visita a Israel del vicepresidente de EE UU, Joe Biden, la semana pasada.

Horas antes, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunciaba la congelación de los fondos de dos empresas establecidas en Gaza, un banco y una televisión, por sus conexiones con Hamás, el movimiento islamista que gobierna en la franja y que Washington considera una organización terrorista. Las entidades afectadas son el Banco Nacional Islámico (INB, en sus siglas en inglés) y el canal de televisión Al Aqsa. El Tesoro declaró en un comunicado que las sanciones "prohíben a los estadounidenses realizar transacciones con las entidades designadas y buscan congelar cualquier activo que puedan tener bajo jurisdicción estadounidense".

El Tesoro aseguró en su nota que el Banco Nacional Islámico fue abierto por Hamás en abril de 2009 para proporcionar servicios financieros a miembros del grupo islámico y empleados de la organización, incluyendo a los integrantes de su brazo militar. "El banco carece de una licencia legal de la autoridad monetaria palestina y opera fuera del sistema financiero legítimo", agregó.

Las acusaciones de EE UU contra la cadena de televisión son similares a las que esgrimen contra el banco. Según el Tesoro, Al Aqsa está financiada y controlada por Hamás y sirve como principal vía para transmitir programas "diseñados para reclutar niños a fin de convertirlos en combatientes armados de Hamás y en suicidas cuando sean adultos".

"El Tesoro no distinguirá entre una empresa financiada y controlada por un grupo terrorista como la televisión Al Aqsa y el grupo terrorista en sí mismo", aseguró el subsecretario del Tesoro Stuart Levey. "El Tesoro denunciará los movimientos para crear instituciones aparentemente legítimas que en realidad están controladas por Hamás y se usan para apoyo de un grupo terrorista", finalizó Levey.