_
_
_
_
CÁMARA OCULTA
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Penélope y la maja

Penélope Cruz tantea el Oscar por tercera vez, o el Oscar la tantea a ella; en cualquier caso, un récord feliz, tres candidaturas en cuatro años. Esta muchacha de Alcobendas, descubierta definitivamente en Jamón, jamón hace ahora 18 años, viene moviéndose con acierto entre películas españolas, italianas, incluso alguna danesa, al margen del salto que dio hace algo más de una década a Hollywood, en donde ha acabado teniendo palco. Aquí pareció pasar inadvertida aquella actividad de la joven actriz, algunas películas suyas ni siquiera se estrenaron; y ojo a La rebelde, italiana de 1993, en la que seducía con naturalidad y con esa mirada profunda de vértigo y furia con que se enfrenta a la cámara dejándote seco; merecería la pena que La rebelde asomara la cabeza por alguna pantalla. Pero como en el cine español no le pasaba gran cosa a Penélope, aunque hubiera intervenido en películas muy notables -Belle époque, sin ser la única, ganadora de un Oscar-, se arriesgó al salto norteamericano. Tres candidaturas personales al Oscar, una de ellas con éxito, confirman que acertó de pleno, y su nueva oportunidad la semana próxima en los Goya por Los abrazos rotos es muestra de que tampoco ha abandonado el cine español.

Por aquí, de Pe se ha hablado más de sus novios que de sus filmes

Por aquí, de Pe se ha hablado demasiado entre correveidiles del corazón mucho más que de su coraje y su talento, más de sus novios que de sus películas. Pero se trata de una epidemia: otras actrices españolas, estupendas aun sin haber estado en Hollywood, están también sujetas a semejantes cotorreos. Las actrices son celebrities o "referentes de la moda", según reza un reciente comunicado de la Academia española haciendo publicidad de una marca de joyas. Se trata de una nueva propuesta para dar, en la noche de sus premios, un galardón especial a "la maja de los Goya", es decir, "a la figura femenina más relevante", la que lleve "diseños exclusivos, zapatos de vértigo y complementos de prestigiosas firmas", o lo que es lo mismo, según el mencionado boletín, "a una mujer transgresora, elegante y misteriosa", como al parecer fue la propia maja de Goya. Mientras Penélope triunfa en el mundo, aquí se quiere celebrar "el estilo, belleza y elegancia españoles". No me extraña que prefiera seguir en Los Ángeles, aunque también por aquella alfombra roja a los Oscar se les pasee su maja.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_