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Reportaje:

"Yo vi a Agustín componer el chotis 'Madrid"

Una ex novia del músico mexicano y sus biógrafos se levantan contra la acusación de plagio de la famosa pieza

Daniel Verdú

"Es como si nos hubieran quitado Yucatán". Así resume Pável Granados, musicólogo y biógrafo de Agustín Lara, la cara que se les ha quedado al conocer que el Ayuntamiento ha editado un libro en el que se duda de la autoría de Agustín Lara del chotis Madrid. No ha sentado nada bien allá en México, la verdad. Y el biógrafo no tiene ninguna duda de que todo lo que se ha dicho en la última semana es falso. Diez años de investigaciones con Guadalupe Loaeza sobre el músico y su libro Mi novia, la tristeza avalan su teoría. "No fue plagio", asegura.

Pero, por si sus tesis fueran poco, este periódico habló ayer con Clarita Martínez, una antigua novia de Agustín Lara que hoy tiene 80 años y que fue pareja sentimental del músico durante seis años. Ella fue testigo del nacimiento de la obra. Hoy sigue viviendo en México. "Claro que la compuso él. Yo vi cómo lo hacía. Recuerdo el día que la terminó. Yo estaba en el piso de arriba de la casa en la que vivíamos. Me llamó, bajé y me la enseñó. No hay duda", recuerda Martínez al otro lado del teléfono. Su historia de amor duró desde 1947 hasta 1953.

Crece la indignación en México por la denuncia de un libro del Ayuntamiento
"Todo esto es absurdo. Él es el autor", asegura Clarita, su ex pareja

Según la versión que ha difundido el Ayuntamiento en el libro Gran Vía (cuyo autor es el escritor Raúl Guerra), quien escribió el famoso chotis fue un músico de la Banda Municipal de Madrid y director desde el inicio de la Guerra Civil española de la banda del Quinto Regimiento llamado Rafael Escalona. Luego, sin embargo, se han alzado varias voces señalando que, en realidad, el nombre de ese músico era Rafael Oropesa. En eso parece que, al menos, es en lo poco que hay acuerdo.

La fuerza de esa teoría radica en el hecho de que Lara no hubiese estado nunca en España cuando compuso la pieza. Sin embargo, como recuerda su biógrafo, tampoco le hizo falta viajar a "la madre patria" para componer todas las suites españolas entre 1931 y 1935. "Lara enfermó en una ocasión de apendicitis y estuvo muy grave y en recuperación. Llegaron dos dramaturgos amigos de él y le regalaron un libro titulado El embrujo de Sevilla, de un novelista uruguayo llamado Carlos Reyes. La obra está llena de casticismos de España y trata de toros y toreros. A Lara le fascinó tanto la canción que compuso Sevilla. Y eso fue en 1931", señala Granados.

Lo que sostiene la teoría que ha circulado por Madrid en la última semana, después de que IU llevara el asunto a una comisión del Ayuntamiento, es que Lara compró el chotis a Oropesa. Éste, supuestamente, tenía una mujer enferma y se lo había escrito para recordarle sus tiempos en la capital y animarla. De ahí, sostienen algunos, que la letra original dijese "cuando volvamos a Madrid", y no "cuando llegues a Madrid". "Pero es que la propia familia ha dicho que su mujer nunca viajó a México", explica Granados. Oropesa sí fue un músico reconocido en su aventura en el exilio. Sin embargo, y esa es la otra baza que juegan los defensores de Lara, murió en 1944, seis años antes de que se compusiera el chotis.

La familia de Oropesa, que durante mucho tiempo tuvo la duda de si Rafael había sido el autor del chotis, ha solicitado estos días que musicólogos expertos confirmen o desmientan esta teoría. "Es que Lara es un personaje muy evasivo, muy difícil de atrapar y siempre ha habido este tipo de rumores alrededor de él", matiza su biógrafo.

Evasivo incluso para sus novias. En un alarde de ingenio conyugal, sólo llegó a casarse con una de ellas. Cuentan los investigadores que cuando sus parejas le solicitaban matrimonio, él organizaba una fiesta tipo convite y contrataba a actores para que hicieran de cura o juez y así ellas pensasen que estaban casándose. Clarita Martínez nunca llegó a formalizar su matrimonio con el flaco de oro. Su relación fue la que puso fin a la que Lara mantuvo con la actriz María Félix (de la que tampoco se han encontrado las actas de matrimonio).

Clarita y Lara se conocieron en los años cuarenta en el mundo de "la noche". Ella no llegaba a los 20 años. Él tenía ya 50. "Yo era bailarina", recuerda. Y una cosa llevó a la otra. "Toda esta polémica es absurda, yo vi cómo lo compuso", insiste. Y poco más cuenta. De este tema no quiere seguir hablando. Según dicen, Lara era muy celoso de su vida y obligó a algunas de sus novias a quemar todos los recuerdos y fotos que guardaban de él.

La polémica sigue. Pero ahora ya con visos de conflicto diplomático. Declaraciones cruzadas y mucho malestar al otro lado del Atlántico. "Agustín es un personaje vivo y un orgullo cultural. No tenía necesidad de comprar una canción. La gente siente como si nos hubieran quitado parte de nuestro territorio. Siempre ha sido un orgullo decir que un mexicano compuso canciones españolas y que ahí gustaron. Básicamente se vive como una falta de cortesía. Como una afrenta". El Ayuntamiento de Madrid está investigando el asunto. Veremos. Pero la historia no acabará aquí, seguro.

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Sobre la firma

Daniel Verdú
Nació en Barcelona pero aprendió el oficio en la sección de Madrid de EL PAÍS. Pasó por Cultura y Reportajes, cubrió atentados islamistas en Francia y la catástrofe de Fukushima. Fue corresponsal siete años en Italia y el Vaticano, donde vio caer cinco gobiernos y convivir a dos papas. Corresponsal en París. Los martes firma una columna en Deportes

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