El PSOE pedirá la identificación de las llamadas de los espías

El informe policial sobre los posicionamientos de los móviles de los tres asesores de Francisco Granados que hoy comparecen ante la juez por el espionaje político ha provocado gran revuelo. Maru Menéndez, portavoz del PSOE en la asamblea de Madrid, reclamará que el juzgado identifique las llamadas emitidas y recibidas por los teléfonos de los espías en el tiempo en que está acreditado que se dedicaron al marcaje del entonces consejero de Justicia y vicepresidente segundo del Gobierno regional, Alfredo Prada.

La estrategia del PSOE es clara: en la medida en que el delito perseguido es el de malversación de caudales públicos, pretende que se clarifique a quién informaban de su actividad, a quién suministraban datos o de quién recibían órdenes cuando realizaban esa tarea.

Y hay dos vías para hallar datos al respecto. Una consiste en interrogarlos hoy en el juzgado para que aclaren quién les daba las órdenes y les coordinaba. En marzo, los tres agentes declararon a la policía que primero habían estado bajo la coordinación de Sergio Gamón, ex director general de seguridad de Madrid destituido tras comandar la requisa de un ordenador -hecho denunciado como robo-, y, posteriormente, a las órdenes del ex inspector Marcos Peña, asesor de Granados.

Gamón o Peña

Pero hay una segunda vía que puede arrojar pistas. El informe policial señala que mientras vigilaban a Prada hasta altas horas de la noche, los agentes emitían y recibían llamadas. Si se prueba que cruzaban llamadas con Gamón o Peña, u otro cargo de Interior, eso ayudaría a aclarar responsabilidades.

Pero igualmente sería ilustrativo que tales llamadas tuvieran relación con los otros cinco agentes investigados por la juez. Porque no se descarta que los partes del espionaje, en los que se aprecian distintas facturas, fueran realizados por agentes distintos de los que realizaban físicamente el seguimiento de Prada o de Manuel Cobo, vicealcalde de Madrid, con los datos que iban transmitiendo por teléfono. Por otro lado, algunas llamadas de los espías coinciden con su fin de jornada de seguimiento: "Desmontamos el dispositivo". El análisis de las llamadas puede corroborar si comunicaban a algún jefe o compañero que levantaban la vigilancia sobre el objetivo, Prada o Cobo. Y en otros casos, a tenor de los partes, pueden haber telefoneado para comunicar que habían perdido al objetivo y buscaban alguna idea sobre su paradero.