Las instituciones estudiarán medidas fiscales contra la caída de ingresos

La llamada del consejero de Economía y Hacienda, Carlos Aguirre, a las diputaciones y ayuntamientos se tradujo ayer por la tarde en más de cuatro horas de reunión. El resultado fue un acuerdo entre los tres niveles institucionales de la comunidad autónoma para constituir de modo urgente seis comisiones específicas de trabajo, en las que estarán, al igual que en la reunión general de ayer, el Gobierno, las tres diputaciones y Eudel, a través de distintos alcaldes o de su presidente. Empezarán a trabajar de inmediato, la semana próxima, con el horizonte puesto en la reunión del Consejo Vasco de Finanzas del mes de octubre y en la incorporación de sus decisiones a la elaboración de todos los presupuestos públicos. La idea inicial, adelantada ayer por Aguirre, es que adopten sus decisiones por unanimidad.

La ausencia de los diputados generales marcó una reunión "muy fructífera"

La próxima semana el Gobierno y las diputaciones estudiarán en el Órgano de Coordinación Tributaria la posibilidad de subir algunos impuestos propios o eliminar ciertas deducciones y bonificaciones para "mejorar el balance fiscal" y aliviar la apurada situación de las finanzas públicas. Una de las posibilidades es suprimir la deducción de los 400 euros que las haciendas forales aplicaron el pasado ejercicio.

El encuentro estuvo marcado por el conocimiento de las cifras más recientes sobre la recaudación, que sitúan ésta, al final del primer semestre, en un 22% de media para la comunidad autónoma, sobre la misma fecha del año pasado. "Lo que está ocurriendo con la evolución de la recaudación no tiene similitud con ninguna otra situación anterior", lo que tiene desorientados a los expertos, afirmó. "No saben cómo seguirá", aunque mostró la esperanza de que se rompa la tendencia.

La reunión se produjo tras el tira y afloja con los diputados generales la semana pasada, que decidieron no ocudir. Pero al término de la cita, la portavoz del Gobierno, Idoia Mendia, que compareció junto al consejero de Economía, la calificó de "muy fructífera y muy cordial". Fue una reunión "de trabajo puro", según indicó Aguirre, en la que no se entró en cuestiones políticas. "Nos hemos centrado directamente en lo que le interesa a todo el mundo", añadió, en referencia a las medidas para salir al paso de la recesión económica y planificar conjuntamente la respuesta institucional, a través de medidas compartidas desde los presupuestos que se elaboren este otoño. El propio Aguirre calificó el encuentro de "preliminar" y dedicado a "marcar el campo de juego a las actuaciones" que se emprendan.

El consejero admitió que la ausencia de los diputados generales, que se negaron a acudir personalmente por el modo en que se realizó la convocatoria y por no estar presente el lehendakari, marcó el encuentro. Pero no se aventuró a afirmar que en caso de haber estado presentes el resultado hubiera sido más productivo. "Hemos avanzado y hemos visto claro que sí existe capacidad de coordinarnos. Independientemente de problemas protocolarios, existen posibilidades de llegar a muchos acuerdos", afirmó.

Las seis comisiones se constituirán y empezaran a trabajar la próxima semana, todas ellas bajo la presidencia de un consejero del Gobierno. Una de ellas abordará específicamente la financiación municipal, algo que satisfizo particularmente al presidente de Eudel, Jokin Bildarratz, que lo resaltó en su valoración de la sesión de trabajo. La presidirá el propio consejero de Economía y Hacienda, Carlos Aguirre, que también estará al frente de una segunda comisión, centrada en la actividad económica e industrial. Su objetivo es poner en común los programas de industria e innovación del Gobierno y los afines en las diputaciones forales. Otra de las comisiones se centrará en el análisis del gasto público, con el fin de alcanzar políticas consensuadas para racionalizar el gasto corriente en el sector público.

Una cuarta comisión se dedicará a analizar la función pública, y será el terreno natural donde se plantee, en su caso, la congelación salarial de los empleados de todas las administraciones, aunque la consejera, Idoia Mendia, que la encabezará, eludió pronunciarse sobre la inclinación del Gobierno en ese terreno. Antes hay que esperar al pronunciamiento de la Administración general del Estado, dijo. La quinta comisión tendrá por misión la revisión y ordenación del gasto en los servicios sociales y a su frente estará la consejera de Empleo y Asuntos Sociales, Gemma Zabaleta, que también presidirá la dedicada a inserción social y empleo. En ésta se hará, entre otras cosas, el seguimiento de las negociaciones sobre la transferencia de las políticas activas de empleo.