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La mediación se abre paso en Rentería tras la tensión de la última semana

Los vecinos suspenden las manifestaciones tras la reacción del Ayuntamiento

La apuesta por la mediación y tender puentes para evitar conflictos como el ocurrido en el barrio de Iztieta de Rentería a raíz del aumento de la sensación de inseguridad en el municipio fue ayer respaldada por los sindicatos ELA, LAB, CC OO y ESK, por asociaciones como Cáritas o SOS Racismo, y varios colectivos de inmigrantes. El Ayuntamiento y el Gobierno vasco van a poner en marcha un servicio de mediación para recuperar la convivencia, deteriorada por la presencia de menores magrebíes conflictivos y las manifestaciones de centenares de vecinos contra algunos comercios de la comunidad marroquí.

En un comunicado, los sindicatos y asociaciones firmantes afirmaron estar "muy preocupados" por las consignas contra el colectivo magrebí que se han gritado en las concentraciones celebradas desde el pasado sábado en Rentería, "en una clara actitud de acoso e intimidación". Todos defienden que los problemas reales que tiene el barrio de Iztieta afectan a toda la vecindad por igual y apostaron por "conocer al otro, escuchar sus temores y sus aspiraciones", para acabar con "los estereotipos que distorsionan la realidad y alimentan el odio contra el extranjero". También recalcaron la necesidad de incidir en la aplicación de políticas sociales y de la normativa legal para solucionar esta situación. "Sabemos que entre muchos de los vecinos que exigen mejoras en el barrio no hay intencionalidad de acusar al colectivo magrebí", añade el texto firmado también por Bilgune Feminista, Amalatz Emakume Taldea, Garaipen, EHGAM, las asociación que regenta la mezquita de Rentería, Almachribia, Mikelazulo Kultur Elkartea, Txintxarri Elkartea y la parroquia Nuestra Señora de Fátima.

Mediadores tenderán puentes entre marroquíes y autóctonos

En paralelo, el Ayuntamiento de Rentería explicó en un comunicado que ya se ha rebajado la tensión social de los últimos días, por lo que agradece a la Asociación de Vecinos de Iztieta por trasladar el mensaje de calma en la manifestación del jueves, cuyos participantes tuvieron un "exquisito comportamiento cívico", según el consistorio. Tras recordar que ya se han puesto en marcha medidas para reforzar la seguridad en este barrio de 3.500 habitantes, con mayor presencia de la Ertzaintza y de la Policía Local, el Ayuntamiento explicó que la semana que viene informará a los vecinos del nuevo servicio de mediación. El consistorio mantuvo una reunión el pasado miércoles con la Dirección de Inmigración del Gobierno Vasco en la cual se acordó establecer este sistema de resolución de conflictos: consiste en recurrir a mediadores cualificados que averiguan las causas del malestar subjetivo de las partes y buscan puntos de encuentro en una mesa de trabajo. Los vecinos, por su parte, convocarán más manifestaciones y se dan un plazo de dos meses para ver cómo se aplica todo lo anunciado.

Ayer mismo, dos jóvenes marroquíes, uno de ellos menor de edad tutelado por la Diputación de Guipúzcoa en el centro de Deba, fueron detenidos por la Policía Local en el barrio tras ser sorprendidos robando ocho kilos de bollería. Se les imputa un delito de hurto, así como otro de insultos y amenazas a los agentes municipales.

También ayer, decenas de inmigrantes se concentraron para reclamar una convivencia pacífica y rechazar las intimidaciones sufridas, desencadenadas tras la detención de un menor magrebí por agredir sexualmente a una mujer. Esta última también secundó el acto y pidió que no se criminalice a quien no tiene la culpa.

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Más prevención

El ararteko, Iñigo Lamarca, ve "inadmisible" estigmatizar a todo el colectivo de inmigrantes marroquíes a raíz de los problemas de convivencia surgidos en Rentería. En su intervención en uno de los cursos de verano realizados por la UPV en San Sebastián, titulado Educación y menores en riesgo, el Defensor del Pueblo vasco explicó que ante problemas complejos, como el que vive la localidad, "no caben soluciones simples". Lamarca apeló a la responsabilidad de los poderes públicos: "Tienen que intervenir de manera inmediata y eficaz, sobre todo en el campo de la prevención", en el barrio de Iztieta de Rentería. Lamarca destacó que las instituciones deben ofrecer todos los medios disponibles para garantizar la convivencia, la seguridad y la tranquilidad de los ciudadanos.

El ararteko considera que los vecinos, por su parte, también tienen que hacer un esfuerzo para "ahuyentar" el riesgo existente de fomentar la xenofobia. También recordó que no puede haber menores de edad "abandonados a su suerte", a pesar de que en ocasiones sean conflictivos. Las instituciones competentes, agregó, "deben ser más diligentes", poner en marcha medidas de prevención y mejorar sus recursos para "salvaguardar la dignidad" y los derechos de todas las personas.

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