Una quincena de 'pymes' catalanas exploran salir a Bolsa

Una quincena de pequeñas y medianas empresas (pymes) catalanas se reunieron ayer en la Bolsa de Barcelona con el presidente del Mercado Alternativo Bursátil (MAB), Antonio Giralt, para explorar la posibilidad de cotizar en este miniparqué, dedicado a empresas de reducida capitalización que buscan expandirse. El importe mínimo de capital flotante es de dos millones de euros.

El MAB, una suerte de versión española del Alternex de París o del AIM de Londres, fue creado por la sociedad Bolsas y Mercados Españoles (BME), el operador de todos los mercados de valores y sistemas financieros en España. Empezó a funcionar hace tres años, en mayo de 2006, con la incorporación de sicavs (sociedades de inversión), y un año más tarde se abrió a las empresas de capital riesgo y a los hedge founds (fondos de alto riego). Hoy cotizan 3.300 sicavs, una empresa de capital riesgo y un fondo, pero ninguna empresa de verdad, reconoció ayer Giralt.

En el Alternex, creado sólo un año antes que el MAB, cotizan más de 130 compañías. La falta de éxito del mercado español es evidente. Hasta el punto de que Morea, una pequeña empresa catalana de comunicación que factura 6,5 millones de euros, no tuvo más remedio que salir a Bolsa hace un año cotizando en el francés Alternex. La primera que tiene previsto estrenarse en el MAB es la madrileña Zinkia, la creadora de la serie animada infantil Pocoyó.

Así que el hambre del MAB se ha juntado con las ganas de comer de varias empresas catalanas con planes de expansión y necesidad de músculo financiero para llevarlos a cabo. Muchas de ellas pertenecen al sector biofarmacéutico; son las que ayer coparon la reunión, auspiciadas por el cluster Biocat.

Entre ellas, Oryzon, con vocación de salir a Bolsa desde hace algunos años; Advancell, que acaba de abrir un laboratorio en el Parque Científico de Barcelona; GP Pharm, perteneciente al grupo Lipotec; la joven Salvat Biotech, y Archivel Farma, con el objetivo de desarrollar e internacionalizar su vacuna contra la tuberculosis.

También estuvieron presentes el fondo de capital riesgo catalán Ysios, especializado en biotecnología, y Palau Pharma, la empresa de investigación y desarrollo del grupo farmacéutico Uriach, pese a haber reorientado recientemente su estrategia y haber iniciado contactos con diversos fondos de capital riesgo para obtener recursos.

El encuentro se abrió a algunas empresas, pocas, de los sectores de las nuevas tecnologías audiovisuales, como la productora Lavínia, y la alimentación, cuyos nombres no han trascendido por voluntad de los organizadores.

No es la primera reunión de estas características que celebra el MAB, pero sí la primera que organiza en Cataluña, que espera que se sume a la iniciativa de otros gobiernos autónomos, como los de Galicia y la Comunidad de Madrid, de ayudar a las empresas a costear el salto al parqué. La primera subvenciona los costes de salir al mercado y la segunda da hasta 80.000 euros una vez cotizada.

La Generalitat está estudiando las ayudas, pero ya ha avanzado para 2010 la introducción de estímulos fiscales para los inversores que adquieran participaciones catalanas del MAB.