Zapatero elude los detalles de su plan anticrisis ante las acusaciones de caos

Las sucesivas rebajas del plan anticrisis expuesto por José Luis Rodríguez Zapatero en el arranque del debate sobre el estado de la nación han proporcionado munición efectiva contra el Gobierno a todos los partidos de la oposición. Improvisación, deslealtad institucional, caos, espectáculo lamentable, resoluciones de votar y tirar, rectificaciones, titulares y medidas no efectivas, son algunas de las expresiones que utilizaron ayer Mariano Rajoy (PP), Joan Ridao (ERC) y Josep Antoni Duran Lleida (CiU) contra Zapatero en la sesión de control al Gobierno en el Congreso.

El presidente se escudó repitiendo tres veces el llamamiento a un acuerdo de todos los grupos y de los agentes sociales para cambiar el modelo económico. Lo que no hizo Zapatero esta vez fue concretar las medidas que con tanto detalle expuso la pasada semana. Ayer, ni siquiera las mencionó. El portavoz de CiU le pidió rebajas para las cotizaciones de los pequeños empresarios y, además, le recordó su propuesta de bajar selectivamente el impuesto de sociedades. En la respuesta, Zapatero ni mencionó el impuesto de sociedades.

El portavoz de ERC le preguntó por las ayudas a las compras de automóviles, que, según dijo, exigen el concurso de las comunidades. "Es como si usted me invita a comer y al final paga sólo los postres", le dijo Ridao.

El presidente le respondió: "Las comunidades tienen plena libertad para decir si se suman a ese proyecto o a esa línea de trabajo, muy habitual en un modelo federal, y lógicamente responden en la medida de sus disponibilidades y de su criterio político". "Lo que hace el Gobierno es proponer, tomar iniciativas, liderar. Hay un número importante de comunidades a las que les ha parecido bien el programa que el Gobierno pone encima de la mesa y hay otras que han optado por otros formatos y otros modelos. Debemos ser prácticos", explicó.

El líder del PP le afeó que rompiera en un día el pacto para impulsar una reforma laboral y le espetó: "Lo único que pretende usted es salir del paso, hacer anuncios que duran tres días". Y Zapatero le respondió con su objetivo de "superar la crisis económica manteniendo la cohesión social y, ante todo, yendo a un nuevo modelo de crecimiento, a un modelo más productivo que nos aleje de la burbuja inmobiliaria, del exceso de ladrillo".