ICV se opone a extender el concierto al bachillerato

Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) sumó ayer un nuevo desacuerdo a la redacción final de la futura Ley de Educación. Si la formación ecosocialista se ha desmarcado de la posibilidad de que determinados centros continúen segregando por sexo a sus alumnos -como ya ocurre con algunos de carácter católico-, ahora la de extender los conciertos escolares al bachillerato y a la Formación Profesional ha abierto una nueva grieta entre ICV y sus socios del tripartito, socialistas y republicanos. La medida, además, topó con el rechazo de los sindicatos CC OO, UGT y USTEC-STE, mayoritario en los centros públicos.

Una enmienda de Convergència i Unió -pactada con el PSC y Esquerra- prevé que la Generalitat pueda subvencionar con fondos públicos centros de bachillerato y formación profesional "en función de las necesidades de escolarización derivadas de la programación educativa".La redacción de la enmienda pactada levanta suspicacias en Iniciativa y en Esquerra Unida i Alternativa por su ambigüedad. La diputada Laia Ortiz lamentó ayer, en declaraciones a EL PAÍS, que sus compañeros de tripartito hayan aceptado una enmienda "sin garantías y sin criterios de cómo se llevará a cabo y totalmente imprecisa".

Ortiz señaló que la ampliación de los conciertos a la enseñanza no obligatoria representará un volumen de recursos de la Administración catalana que "irá en detrimento" de la escuela pública. "No sólo no estamos de acuerdo en el capítulo de financiación, sino también en el del sistema educativo".

También los sindicatos USTEC-STE, UGT y CC OO rechazaron la extensión de los conciertos al bachillerato y la FP. Sólo USOC, mayoritario en los centros concertados, aplaudió la medida. Melina Rodríguez, miembro del secretariado de USTEC-STE, el principal en los colegios públicos, afirmó que el pacto del PSC, CiU y ERC es "una puñalada trapera a lo que queda de educación pública".

Rodríguez recordó que la Generalitat anunció varias medidas para recortar costes; entre ellas, la de no cubrir bajas de menos de 15 días. "Ahora resulta que para esto sí hay dinero. No sabemos de dónde van a sacarlo", agregó. De entrada, el sindicato desconfía de la propuesta de ERC de elevar el gasto en educación hasta el 6% desde el 4% actual. La representante de USTEC-STE aseguró que lleva años pidiéndolo y que si no se dio este salto en época de bonanza, menos se dará en plena crisis.

Contra la segregación

El secretario general del sindicato CC OO, Carles Gallego, rechazó este "planteamiento porque no abunda en un sistema educativo integrador y de más calidad". Gallego insistió en que la educación sea gratuita y libre de cualquier "segregación en función de los orígenes y el entorno". "No es adecuado para el sistema educativo y supone un paso atrás para la educación, en especial en comparación con otros países de Europa".

UGT, en cambio, fue más prudente. Su secretario general, Josep Maria Álvarez, dijo que antes de enjuiciar la medida quiere "conocer el contenido de toda la ley". "Todavía nos la tienen que entregar, pero mantenemos una discrepancia global, porque una ley que rechaza el profesorado nace muerta", afirmó. Álvarez reclamó, además, al Ejecutivo catalán que trate de recabar el máximo consenso entre los sindicatos. "El consenso político es positivo para una ley de educación, pero también el acuerdo social es necesario", recordó Álvarez.

Sólo USOC se mostró a favor de extender el concierto al bachillerato. "Es una medida que llevábamos en nuestro programa", aseguró el secretario general de educación del sindicato, Francesc Portalés. "Entendemos que es una buena medida para el sistema educativo", afirmó Portalés. Para el dirigente de USOC, las condiciones deben ser las mismas que la del resto de los conciertos educativos.