La UPA denuncia a Carrefour y Dia por vender aceite por debajo de coste

Las grandes superficies comerciales se han enzarzado en una guerra por el mercado del aceite que tiene a los olivareros como víctimas propiciatorias. Dos de las principales cadenas de alimentación con implantación en Andalucía, Carrefour y Día -ambas del mismo grupo empresarial- han lanzado durante los meses de enero y febrero ofertas en las que vendían aceite de oliva en una horquilla que oscila entre 1,65 y 2,25 euros el litro, una cifra que, teniendo en cuenta los precios en origen del aceite -entre 1,89 y 1,99 el litro en esas fechas- más los costes de producción -unos 0,46 euros por litro-, lleva a concluir a la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) que se ha vendido por debajo de costes o a pérdidas, una práctica que, según esa organización agraria, vulnera la Ley de la Competencia y pone al sector oleícola contra las cuerdas.

Nueve de cada 10 botellas de aceite se venden en las grandes superficies

Tanto Carrefour como Dia negaron ayer que estén vendiendo a pérdidas. "Nuestra empresa cumple escrupulosamente la ley", aseveró una portavoz de Carrefour, una cadena que el pasado año facturó en Andalucía 808 millones de euros con 1.700 empresas que emplean a más de 9.000 trabajadores.

La UPA ha realizado una investigación en la que se constata que estas cadenas están realizando "abusos" como reclamo de nuevos consumidores a costa de dar un golpe mortal a los productores olivareros. "A estos precios, el 50% del olivar andaluz está por debajo de costes", aseguró ayer Agustín Rodríguez, líder regional de la UPA, organización que va a denunciar esta venta ante la Agencia Andaluza de la Competencia y que ha convocado una manifestación para el 14 de marzo ante el centro comercial Carrefour en Jaén, una protesta que será el inicio de otras en toda la comunidad.

La denuncia de la UPA podría llegar al Tribunal de la Competencia de Luxemburgo, que ya en 1999 le dio la razón en un caso similar de fijación de precios a la baja en el sector lácteo. La UPA urge también a elaborar una Ley de Márgenes Comerciales. "Si el Gobierno no asume su responsabilidad terminará siendo cómplice de los efectos perversos que están produciendo estas grandes superficies", recalcó Rodríguez.

En todo caso, la incidencia de esta venta de aceite no es baladí, pues actualmente nueve de cada 10 botellas se venden en las grandes superficies, y apenas el 10% se limita al comercio tradicional y a las cooperativas. Las grandes cadenas de distribución están recurriendo cada vez a las marcas blancas propias para ganar cuota de mercado. En el caso del aceite, según la UPA; las marcas blancas llegan ya al 45,5% en el virgen extra y al 69,5% en el virgen.