El conflicto de Oriente Próximo
Después de tres semanas de devastación de Gaza y de matanzas que se han cobrado más de 1.100 muertos palestinos, y tras incesantes gestiones diplomáticas, ayer se imponía el criterio de la ministra de Exteriores israelí, Tzipi Livni, y cobraba fuerza el alto el fuego unilateral por parte de Israel.
Gaza arde arruinada y Hamás encaja un castigo demoledor a su milicia. Y, sin embargo, las imágenes de televisión han provocado un golpe mortal a su rival político, Al Fatah, el partido fundado por Yasir Arafat, hegemónico durante medio siglo. No son las tomas de los niños sin piernas o los cuerpos quemados; son las de los policías de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) cargando contra los manifestantes de las ciudades de Cisjordania.
"Si no hubiera sido por él, yo no estaría aquí". Mary Berkwits, una de las supervivientes de lo que en Nueva York se ha bautizado como "milagro en el Hudson" se expresaba ayer así con relación al piloto Chesley Sullenberger. El hombre que consiguió evitar el jueves la muerte de las 155 personas que viajaban en el Airbus A320 de la compañía US Airways se ha convertido en el héroe nacional.
El primer ministro ruso, Vladímir Putin, dijo ayer que "se están ultimando interesantes acuerdos" para zanjar el contencioso con Ucrania que tiene sin gas a buena parte de la Unión Europea. En la rueda de prensa que ofreció junto a la canciller alemana Angela Merkel, Putin aseguró que la reunión mantenida en Berlín con representantes de cuatro grandes gasistas europeas permite confiar en la creación de un consorcio.