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Jesús Neira tiene una enfermera asignada las 24 horas del día

La familia se quejó de desatención tras una crisis del profesor

Jesús Neira, el profesor agredido al tratar de defender a una mujer que estaba siendo maltratada, tiene una enfermera asignada a su habitación las 24 horas del día. En realidad, tres; una por turno de mañana, tarde y noche. Neira está ingresado en el hospital público Puerta de Hierro desde el 6 de agosto, cuatro días después de recibir una brutal paliza a manos de Antonio Puerta, que le atacó tras mediar en la discusión que éste mantenía con su pareja. Desde que el profesor volvió a planta la última vez, el 29 de diciembre, tres enfermeras se han estado ocupando de él permanentemente, incluso permaneciendo en la habitación, a pie de cama, cuando no hay ningún familiar acompañándole.

Los trabajadores han protestado ante la dirección por el agravio comparativo

Una portavoz del Puerta de Hierro lo confirmó ayer, y añadió que Neira cuenta con esta atención especial, que corre a cargo del hospital, "porque lo necesita". El portavoz de la familia Neira, Javier Castro, aseguró ayer que la asignación de una enfermera 24 horas fue "una decisión médica" y subrayó que, "cuando hay un amigo o un familiar con él, las enfermeras vuelven al control para estar al servicio de toda la planta".

Castro también relató que la familia habló con la dirección del hospital para pedir un "refuerzo de la asistencia de enfermería", después de la crisis respiratoria que sufrió Neira el 10 de noviembre, poco después de haber pasado a planta tras permanecer tres meses en la UCI. Esa crisis le llevó de nuevo a cuidados intensivos y fue necesario hacerle una traqueotomía.

La familia consideró que el profesor no fue atendido correctamente y presentó una reclamación. "Era fin de semana y las cosas no salieron bien. Los médicos tardaron en bajar" a atenderle, explicó ayer Castro. Neira, añadió, lo pasó muy mal durante la crisis: "Sintió mucha angustia, porque veía que se ahogaba". El profesor está todavía "muy mal, muy débil, absolutamente impedido, y tiene mucho miedo a ahogarse o atragantarse al comer".

La asignación de una enfermera al profesor ha provocado mucho revuelo entre el personal sanitario del hospital. "No es justo para el resto de pacientes", se quejaba ayer una enfermera. "Normalmente, hay dos o, con suerte, tres enfermeras para 25 enfermos". El sindicato CC OO asegura haber recibido "muchas" quejas de trabajadores, por lo que el lunes pasado trasladó ese malestar a la dirección. "Nos contestaron que la decisión venía de arriba", afirmó una delegada de CC OO. Médicos consultados por EL PAÍS aseguraron que es insólito que un hospital público destine personal en exclusiva a un paciente.

Casi tres horas de espera

Isabel Cepeda, la esposa de Jesús Neira, presentó una reclamación al hospital el 10 de noviembre. El profesor manifestaba "síntomas de ansiedad" desde las 20.30 del día anterior. "El paciente solicita medicación intravenosa, ya que la dada no resulta", asegura el texto.

"Los médicos, después de casi tres horas de espera, le administran dicha medicación", concluye la queja, presentada el mismo día que Neira tuvo que volver a ingresar en la UCI por una crisis respiratoria. El portavoz de la familia, Javier Castro, aseguró ayer que el profesor pasó la noche sedado y que, a la mañana siguiente, le tuvieron que llevar a la UCI y hacerle una traqueotomía. Volvió a planta el 29 de diciembre.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, nombró la semana pasada a Neira presidente del Consejo Asesor del Observatorio contra la Violencia de Género.

El 23 de octubre le concedió la medalla de oro al Mérito Ciudadano. Ninguno de estos reconocimientos ha hecho que la familia retire la demanda por negligencia médica que presentó en agosto, después de que cuatro médicos visitaran al profesor y ninguno le detectara el derrame cerebral que le llevó al coma.

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