EA dice que "es pronto" para apoyar la moción contra el alcalde de Azpeitia
El presidente de Eusko Alkartasuna (EA), Unai Ziarreta, se mostró ayer dispuesto a retomar en los próximos días las conversaciones con el PNV y Aralar para analizar la situación política en el Ayuntamiento de Azpeitia, pero subrayó que "es pronto" para decidir una moción de censura contra el alcalde de ANV. "Tenemos que reunirnos los tres y tratar este asunto la próxima semana", dij Ziarreta a este diario.
Tras el asesinato a manos de ETA del empresario azpeitarra Ignacio Uria, el alcalde, Iñaki Errazkin, de ANV (ilegalizada por pertenecer al entramado terrorista), rechazó condenar el atentado. La consecuencia fue que EA y Aralar rompieron el pacto que permitía gobernar a ANV. Ahora el PNV quiere desalojar al regidor, pero para la moción de censura hacen falta nueve ediles y los peneuvistas tienen ocho. "Nuestras ocho firmas están ya encima de la mesa para presentar la moción. Falta un voto", reiteran fuentes del PNV. Un voto que sólo puede venir de EA o de Aralar, pues en Azpeitia sólo están representados partidos nacionalistas.
"Dispuesto a hablar"
Al día siguiente del atentado y de romper su pacto con ANV, Ziarreta acusó a los peneuvistas de practicar el "carroñerismo político" por pretender ocupar los "sillones" del consistorio con el fallecido de cuerpo presente. Y sigue pensando que "aún es pronto" para tomar decisiones porque "ha pasado muy poco tiempo". EA, que cuenta con dos ediles, está "dispuesto a hablar con todos" sobre la moción de censura.
Ziarreta confirmó que no ha recibido aún propuesta alguna del PNV para acordar un programa de gobierno: "No ha habido ningún movimiento; estamos en la misma situación que hace tres días". El PNV retomará esta semana su planteamiento, aunque ha dejado claro dónde está la llave para desalojar a ANV, porque Aralar ya adelantó -el mismo día que abandonaba las tareas de gobierno en Azpeitia- que no iba a respaldar una moción.Los movimientos entre los partidos nacionalistas para desalojar a ANV de la alcaldía de Azpeitia (14.000 habitantes) son paralelos a la polémica entre PP y PSOE a nivel nacional sobre las posibilidades de disolver el ayuntamiento por decreto del Consejo de Ministros. El PP volvió a reclamar ayer que se haga inmediatamente; el Gobierno asegura que no hay base legal y propone una modificación legislativa que tardaría al menos seis meses.
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