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Reportaje:

El cemento sepulta a Federico

El acoso urbanístico se ha cebado con los simbólicos espacios lorquianos

Los chopos dicen: No. / Y el ruiseñor: Veremos. Los chopos de Fuente Vaqueros que hablaban con Federico García Lorca se van quedando mudos. Con el paso de los años van perdiendo su particular batalla con políticos y empresarios. Buena muestra de ello es el Polígono Industrial La Fuente, situado a la entrada del pueblo, en el mismo lugar por donde paseaba Federico escuchando el agua de las acequias, entre las hileras de chopos en las que oía a los ruiseñores.

La historia de las agresiones a la memoria del poeta viene de lejos. Durante la dictadura, los poderes fácticos no tardaron en darse cuenta de la repercusión internacional que había tenido el fusilamiento de Lorca. Destruir el simbolismo de los lugares relacionados con el poeta se convirtió en un objetivo. En los años sesenta, donde se creía que estaba enterrado el poeta, se levantó un edificio. El sentido de la construcción es incuestionable. Alejado de todo, sobre un monte, sin un edificio de su altura en todo el término municipal de Alfacar, fue levantado para dañar el ambiente mágico que se respiraba en la carretera en la que fue asesinado el poeta. "Es muy posible que respondiera a una estrategia. La casa es verdaderamente bochornosa. Está fuera de lugar y es incomprensible que se construyera un edificio tan alto", explica el hispanista británico Ian Gibson, que une la construcción con otro hecho que tuvo como propósito acabar con la zona: "Los franquistas llenaron de pinos el Barranco de Víznar porque creían que de ese modo escondían los crímenes que allí se cometieron".

En los 60 se levantó un bloque donde se creía que estaba enterrado Lorca
El Parlamento pide que se protejan los lugares relacionados con el poeta

El edificio está "fuera de ordenamiento", como explica la alcaldesa de la localidad, Fátima Gómez. "Es evidente que no respeta para nada el entorno. Lo que sucede es que es una construcción de hace más de 50 años por lo que el delito estaría prescrito y es muy difícil llevar a cabo ninguna iniciativa para plantear una solución", añade.

Con la llegada de la democracia no terminó la amenaza a los paisajes lorquianos. El ataque más conocido partió del propio Ayuntamiento de Alfacar. A 200 metros del barranco de Víznar y a unos 20 de una de las dos posibles ubicaciones de la fosa del poeta, en 1995 se comenzó a levantar un campo de fútbol, que no dejó de construirse hasta que Isabel García Lorca, hermana de Federico, mandó una carta a Manuel Chaves en la que decía que el hecho de que fueran socialistas los que habían autorizado la obra era "peor porque allí asesinaron a sus correligionarios". El presidente de la Junta paralizó la actuación y el campo quedó a medio terminar.

Legales o no, lo cierto es que al final de la carretera que une Viznar y Alfacar, el camino más simbólico de la barbarie de la Guerra Civil donde fusilaron al poeta, se han construido chalés y urbanizaciones. A escasos diez metros de la entrada del Parque García Lorca se encuentra uno de ellos. En opinión de José Caballero, propietario de la inmobiliaria Alfaidamar, en la simbólica carretera "se han cometido auténticas barbaridades". Para el empresario, que también tiene promociones en la zona, el caso del edificio del Caracolar es "lo más llamativo de una larga lista que se va a alargando año a año".

Las agresiones al patrimonio sentimental lorquiano no se limitan a la zona donde el poeta fue asesinado. La casa en la que vivió en la Acera del Darro ha desaparecido, la casa de la familia Rosales, en la que fue detenido, hoy es un hotel cuyo restaurante se llama El rincón de Lorca como reclamo turístico. Por otra parte, la Casa Natal de Federico García Lorca en Fuente Vaqueros ha sido también testigo de cómo el ladrillo va haciendo más difícil acercarse al mundo del autor de Poeta en Nueva York. Hace dos años, en Fuente Vaqueros se inició la construcción de un bloque de viviendas cercano a la casa...

Ante esta situación a la que no se ha dado una respuesta contundente a lo largo de los años, el Parlamento de Andalucía ha presentado una proposición no de ley por la que se solicita a la Junta de Andalucía que sean catalogados como Sitio Histórico según la nueva Ley de Patrimonio Histórico todos los lugares relacionados con el poeta granadino. Sería un poco de oxígeno para García Lorca en medio de tanto asfalto.

Monolito que señala el lugar en el que, según Ian Gibson, está la fosa de Lorca.
Monolito que señala el lugar en el que, según Ian Gibson, está la fosa de Lorca.M. ZARZA

Del 'Burguer King' a los lorquianitos

El universo lorquiano ha servido como reclamo publicitario o como atractivo turístico en muchas ocasiones. Algunas de ellas han traspasado los límites del buen gusto para convertirse en una auténtica falta de respeto hacia la memoria de un fusilado. Son frecuentes las campañas publicitarias en la que se utilizan lemas del tipo "verde que te quiero verde", uno de los versos más famosos del Romancero gitano. Burguer King empleó esa frase en una campaña nacional para publicitar sus ensaladas, por citar algún ejemplo.

El caso más sangrante fue denunciado por el poeta Daniel Rodríguez Moya, que visitó los restaurantes de la zona de Víznar y Alfacar y contempló atónito cómo en algunos de ellos podían comerse platos de carne con el nombre de Federico, a escasos metros del lugar donde fue fusilado y junto a las fosas de miles de víctimas de la Guerra Civil. "Hay un restaurante llamado La Ruta de Lorca en el que puede comerse una brocheta lorquiana, un lorquianito o unas ensaladas de doña Rosita. Me parece una barbaridad, una auténtica vergüenza y una falta de respeto inexplicable", señaló Rodríguez Moya. En el mismo sentido, Ian Gibson aseguró que es una buena muestra de la "falta de sensibilidad" que existe en buena parte de Granada hacia los crímenes que allí se cometieron. "El restaurante pertenece a un antiguo alcalde de Alfacar. Es una vergüenza inexplicable", concluyó.

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