En qué gastarse 135 millones

"Ni un solo euro de vuelta". Es el lema que entonan al unísono los ayuntamientos de las tres capitales vascas, voces procedentes tanto de los bancos de los equipos de gobierno como de la oposición. Bilbao, San Sebastián y Vitoria planean presentar en tiempo y forma los proyectos que les permitan acceder a la cuantía máxima que les reserva el nuevo Fondo de Inversión Municipal (62,5, 32,4 y 40,6 millones de euros, respectivamente), el plan municipal contra la crisis o plan Zapatero que, por un importe de 8.000 millones de euros, acaba de lanzar el Gobierno central. Su objetivo, generar empleo a partir de la obra pública.

BILBAO

El PSE bilbaíno se ofrece a Azkuna para consensuar los proyectos

San Sebastián ya maneja una lista de 39 actuaciones en sus barrios

El Proyecto Alhóndiga y "algún plan deportivo", seguros en Vitoria

"Ya nos hemos puesto a trabajar", destaca Andoni Aldekoa, director del Gabinete de la Alcaldía de Bilbao. "Las diferentes áreas trabajan en la redacción de los proyectos susceptibles de ser incorporados al plan. Y no sólo vamos a presentar proyectos por valor de 62,5 millones, sino por un importe superior en previsión de que hubiese un remanente", añade. Aldekoa no puede adelantar qué obras optarán a la ayuda del Gobierno central. "La norma acaba de salir hace tres días; aún nos queda mes y medio de trabajo".

El PP da por descontado que Bilbao optará a los 62,5 millones de un plan que "llega tarde", según su portavoz municipal, Cristina Ruiz. "Aun así, hay que aprovechar la oportunidad y dar prioridad a las inversiones que generen riqueza y oportunidades", añade. Los populares proponen tres actuaciones: adecuar los terrenos para la creación de un Parque Tecnológico en Zorroza, un plan específico de urbanismo comercial y la construcción de rampas y ascensores en barrios.

También señala en tres direcciones el PSE: mejoras en los barrios (aceras, iluminación, parques, zonas de recreo, etcétera), escaleras mecánicas y rampas para los 15 barrios con dificultades de acceso y recuperación de los patios de manzana y arreglos de fachadas y urbanización en los barrios en que aún existen infraviviendas. "Es una iniciativa muy oportuna", se felicita el portavoz socialista, Txema Oleaga, quien además de poner su influencia en Madrid al servicio del equipo de gobierno, invita a PNV y EB a convocar una junta de portavoces o un pleno extraordinario para que todas las formaciones puedan consensuar los proyectos. "El Real Decreto no habla de ayudar al partido socialista, sino al Ayuntamiento de Bilbao. Y, que se sepa, el alcalde soy yo", fue la respuesta de Iñaki Azkuna a la mano tendida de Oleaga.

SAN SEBASTIÁN

El Ayuntamiento donostiarra es, posiblemente, el que más adelantados tiene sus planes. Ya maneja una lista de 39 proyectos concretos vinculados a barrios susceptibles de acogerse al plan Zapatero, pero no serían los únicos. Fuentes municipales indican que optarán a las ayudas, entre otras actuaciones, el funicular de Intxaurrondo a Loiola, un bidegorri por el túnel de Txaparrene, un aparcamiento disuasorio en Illunbe y en el solar del trinquete, un campo de hockey y fútbol en Puio, canchas deportivas en Amara Berri, una guardería en Martutene, la planta de tratamiento de fangos en Altza e Igeldo, la recuperación del caserío Tolare, la recuperación de las murallas y edificaciones de Urgull, el parque de Lugaritz en el Antiguo, la rehabilitación del edificio de RNE en Urkia para convertirse en centro de interpretación de la naturaleza, un parque fluvial de Ibaiale, la reurbanización de Oleta, la plaza de Montpellier y el paseo de Zubieta y de Igeldo y los ascensores en Azkuene.

"Las ayudas llegan tarde, pero todo lo que sea apoyar que la Administración mantenga sus inversiones es positivo", indica Xabier Ezeizabarrena, portavoz municipal del PNV. En su opinión, los proyectos de San Sebastián deberían atender tres prioridades: promoción de vivienda pública, "a poder ser en alquiler"; proyectos de política social, "tanto en forma de inserción como de ayudas", y evitar la paralización de proyectos ya están en marcha.

"La medida de ZP es como una aspirina: alivia, pero no resuelve", protesta María José Usandizaga, portavoz popular, quien lamenta que el plan vaya a destinar "mucho dinero para ANV". Usandizaga ya ha confeccionado un listado de propuestas, como la ejecución de un bloque de viviendas en alquiler para jóvenes en Errotaburu y otro para mayores en Aiete, nuevos edificios para la Policía Municipal en Intxaurrondo, Altza y Aiete, ascensores en Morlans-Aiete, en Azkuene y en Nuestra Señora del Coro, un campo de rugby en Arrobitxulo y un centro de remo en Ibaialde, la construcción de una Casa de la Mujer, la rehabilitación del caserío Tolare y obras de mantenimiento y servicios urbanos por dos millones.

VITORIA

Patxi Lazcoz, alcalde vitoriano, aplaude que el Gobierno central, a diferencia del vasco, se haya acordado de los ayuntamientos al diseñar un plan de choque contra la crisis. El pasado viernes, su equipo de gobierno se reunió con directores de departamentos y organismos municipales para consensuar un plan y "aprovechar al 100% la cantidad que nos ha sido otorgada", afirma Lazcoz. Siempre con la creación de empleo como prioridad, los proyectos que presente Vitoria irán enfocados a obras en las vías públicas, una partida que había sido inicialmente reducida en el presupuesto de 2009 por la crisis, y en los edificios municipales. "Aún es pronto para anunciar proyectos concretos, pero la Alhóndiga y la calle Sancho El Sabio estarán entre los grandes beneficiados. También hay algún proyecto deportivo que se beneficiará", resume el primer edil.

Mikel Martínez, portavoz del PNV en el consistorio vitoriano, cree que las condiciones que fija el Real Decreto resultan "muy exigentes y muy restrictivas", e insta al equipo de gobierno a que haga "todo el esfuerzo necesario para pedir y recibir hasta el último euro, pues lo contrario sería imperdonable en plena crisis". Martínez aboga por impulsar los proyectos en las calles y la rehabilitación de edificios públicos. "No podemos pensar en grandes proyectos pues la limitación de los cinco millones de euros [por proyecto] y el año de ejecución lo impiden", lamenta.