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INFORME DE 2007 CON LA OBRA REALIZADA | Investigación sobre el Museo Balenciaga

Construcción "no apta" y "contexto funcional erróneo"

Pese al descalificador informe técnico del Ministerio de Cultura, durante 2006 y 2007 la sociedad Berroeta Aldamar (Gobierno vasco, Diputación de Guipúzcoa y Ayuntamiento de Getaria) emprendieron y sufragaron la construcción del edificio, siguiendo el proyecto que había sido rechazado.

Otro informe, éste de 2007 y con el membrete Cristobal Balenciaga Museum, pero sin firma, puso al descubierto la grave situación y determinó la paralización de las obras "para evitar más gastos y defectos en la ejecución". Este informe lo realizó, tras dimitir Camio, el equipo que quedó a su marcha, también relevado en febrero de este año.

Su conclusión general es que la programación de espacios resulta "no apta" y es "absolutamente necesario" cambiarla. Asimismo, se señala que no se tuvieron en cuenta elementos "fundamentales para garantizar una gestión seria del museo". El autor o autores muestran su perplejidad ante una división espacial hecha "sin datos sobre el número de trabajadores o requisitos como el tamaño, la climatización, la luz o las conexiones funcionales". El informe dice que requerirán "una solución arquitectónica compleja" los espacios para instalaciones contra incendios y climatización, que "coartan el uso y efecto espacial de las zonas de exposición". Áreas como las de administración, restauración, tienda, cafetería, biblioteca, seguridad, locales para el personal y auxiliares, así como los almacenes, estarían por definir y planificar en detalle.

La obra se paró "para evitar más gastos y defectos"
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El escándalo de Getaria

Se menciona un sinfín de defectos y carencias, como problemas en la unión del suelo con la fachada de vidrio y en la de ésta con el tejado, en los pisos y el hueco entre planta baja y primera. Cuestiona el número de puertas y su tamaño, los bloques sanitarios y las escaleras y ascensores. Advierte de revestimientos y suelos ya deteriorados y de humedad ascendente en el subterráneo destinado a albergar las prendas en los tiempos de reposo entre exhibiciones. El edificio "no permite las entregas con un camión de 17 metros" y no se ha previsto aparcamiento subterráneo ante el previsible aumento de vehículos en la pequeña localidad.

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