Gastronomía
Un tesoro enterrado, feo y delicioso
Truquillo de Ferran Adriá para usar trufa en tiempos de crisis: la cuchara-pinza. Se engancha un trozo de trufa y a cada cucharada los aromas llegan al comensal sin que éste se trague un producto que alcanza los 1.500 euros el kilo. Con esta broma genial Adriá cerró el pasado lunes su ponencia en el I Congreso Internacional de Gastronomía Micológica de Soria.