Los partidos abren la guerra por las pensiones con la vista en las urnas
El PNV carga contra el PSE, al que acusa de mantener un "doble discurso"
La guerra entre el tripartito y el PSE por el complemento de las pensiones más bajas es un hecho. Con las elecciones autonómicas a la vuelta de la esquina (en marzo) y con el Parlamento a punto de echar la persiana (le quedan dos meses), los partidos se han embarcado en un conflicto sobre una materia muy sensible, los complementos económicos para los ciudadanos cuyos ingresos procedentes de las pensiones no alcanzan al Salario Mínimo Interprofesional (SMI).
El PNV se sumó ayer a las críticas de EA a los socialistas, a los que acusan de mantener "un doble discurso". Por una parte, asegura el PNV, en Euskadi apoyan la ayuda y, por otro lado, en Madrid la rechazan y se pliegan al dictado del presidente Rodríguez Zapatero. Un reproche habitual cuando se empieza a oler el periodo preelectoral. Por su parte los socialistas, han tildado de "mezquinos" a los dos socios nacionalistas del Gobierno vasco por sembrar la preocupación entre los pensionistas.
Los socialistas creen "mezquino" levantar la inquietud de los pensionistas
La bronca llega después de que el PSE y EA (partido que dirige el Departamento de Empleo, Justicia y Seguridad Social, encargado de dar las ayudas) cerraran un acuerdo en marzo de 2007, que presumiblemente blindaba este complemento. Por medio de ese pacto se equiparaban los subsidios más bajos con el SMI, lo que garantiza a alrededor de 21.000 pensionistas percibir 700 euros al mes por doce pagas, si se incluye la parte proporcional de las aportaciones extra de julio y diciembre. Una ley aprobada en junio por el Parlamento permite ir cobrando la ayuda.
Pero el conflicto ha estallado cuando la Cámara se disponía a tramitar la norma marco destinada a reformar todas las actuaciones de lucha contra la pobreza y subsumir esa norma de junio en una más amplia que recogiera el complemento y una reorganización de otro tipo de ayudas, como la renta básica, las Ayudas de Emergencia Social (AES) o el complemento de vivienda. El origen es una advertencia del Ministerio de Administraciones Públicas de que el Gobierno vasco no tiene competencia para completar las pensiones, aunque puede conceder ayudas asistenciales para aumentar los ingresos de los pensionistas. Los socialistas han tratado de soslayar el problema con unas enmiendas parciales que rebautizan el "complemento de pensiones" como "renta de no empleabilidad", es decir, dirigida a los pensionistas que no pueden acceder al mercado de trabajo. Sin embargo, para el tripartito esto supone una rebaja de lo acordado inicialmente, porque podrían quedar fuera algunos colectivos originalmente beneficiados, como viudas jóvenes y discapacitados leves que pueden trabajar y que ahora cobran pensiones muy bajas.
El PNV ha anunciado que presentará mociones en todos los ayuntamientos pidiendo al Gobierno central que eleve la cuantía de las pensiones o que, al menos, permita al Ejecutivo de Vitoria incrementarlas. Es una forma, según el PNV, de que los socialistas se "retraten".
El PSE, que considera "mezquino" generar incertidumnbre entre los pensionistas, replicó ayer que las enmiendas que han presentado al proyecto de ley tienen como único objetivo dar seguridad jurídica a estas ayudas, así como que el Gobierno vasco haga todos los trámites con los pensionistas, en lugar de volverles locos de ventanilla en ventanilla. El PSE añadió que la "postura irresponsable" del departamento sólo busca desacreditarles.
"Más consideración"
"Lo que tenían que hacer los partidos es unificar criterios y, sobre todo, tener más consideración con la gente que está más fastidiada económicamente. Hay viudas que ni siquiera acuden a los servicios sociales de los ayuntamientos a pedir el complemento porque les da verguenza decir lo que ganan". Así de tajante se expresa José Antonio Caro, vicepresidente de la Asociación las Cuatro Torres de Vitoria, que cuenta con cerca de 33.000 ancianos asociados. Caro advierte a los partidos de que "no se puede jugar con gente que raya el umbral de la pobreza".
El vicepresidente de las Cuatro Torres también se queja "del mareo" al que están sometidos los pensionistas para poder cobrar el complemento prometido. "Piden todo tipo de papeles. En un momento como éste, en el que la administración sabe hasta a qué hora nos dormimos, es incongruente".
El complento va dirigido a varios colectivos. Por una parte, a los 7.527 pensionistas que en la actualidad completan su pensión con la renta básica hasta llegar al 88% del SMI. Por otro lado, a alrededor de 3.000 pensionistas que superan el 88% del SMI pero no llegan al 100%. El tercer colectivo son las 10.255 personas que accederán al nuevo complemento el próximo 1 de enero al computarse sólo sus pensiones, sin tener en cuenta las rentas de los familiares que viven en el mismo domicilio.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.