La reforma de EITB se queda en nada tras tres años de debate en la Cámara

El ejercicio en funciones durante varios años (siete en este caso) en el cargo de director general de EITB o incluso su inexistencia, como ocurre desde hace ya diez meses, seguirán siendo posibles en Euskadi después de que ayer se fueran al traste tres años de trabajo en la Comisión de Control de EITB para reformar la ley que rige el ente audiovisual.

La causa, además de la lentitud en el funcionamiento de la ponencia correspondiente, ha sido una simple cuestión de procedimiento. El adoptado al acumular dos iniciativas de distinto origen -una primera proposición de ley del PP restringida al nombramiento e interinidad del director general y una posterior proposición no de ley del PSE para estudiar una reforma general de la ley- ha resultado ser irregular. Así lo dejó establecido la Mesa del Parlamento en su reunión del 10 de octubre pasado en respuesta a una consulta realizada por los grupos del PNV, EA, PP y PSE. Con todo el trabajo hecho, comparecencias de especialistas y propuestas articuladas de cada grupo sobre la mesa incluidas, los ponentes decidieron ayer dejar caer la cuestión. Para abordarla de nuevo habrá que esperar a que salga adelante otra iniciativa en la próxima legislatura.

EITB lleva diez meses sin director general, tras siete años de interinidad

En una actuación para la que nadie ofrece una explicación lógica, ni los integrantes de la ponencia ni el presidente de la comisión, Oskar Matute, de EB, habían pedido hasta principios de este mes la opinión del órgano de gobierno de la Cámara. Y ello pese a que las dudas han planeado desde el principio sobre la decisión de la comisión de acumular ambas cuestiones en un único dictamen. Los servicios jurídicos de la Cámara señalaron inicialmente que era posible siempre que todos los grupos estuviesen de acuerdo. La Mesa ha dicho finalmente que no lo era ni siquiera en ese supuesto. Curiosamente, ha sido el grupo de EHAK el que más ha advertido contra el procedimiento que ha dado lugar a este desenlace.

"Lamento que haya sucedido esto y todavía no tiro la toalla", señaló ayer Matute a EL PAÍS, quien declinó realizar cualquier otro comentario y culpó al obsoleto Reglamento de la Cámara.

La reconducción del asunto exigiría los siguientes pasos: un acuerdo mayoritario antes del próximo viernes que los grupos firmantes deberían convertir en una proposición de ley; la toma en consideración de ésta en pleno; su vuelta a la Comisión de Control y la constitución de otra ponencia, cuyo trabajo se reduciría al mínimo formal, puesto que el acuerdo existiría previamente. Con todo ello, cabría la posibilidad de llegar a tiempo al último pleno de diciembre.

Pese al voluntarismo mostrado por Matute, quien no participó en la reunión de ayer, los grupos dieron por decaída la iniciativa. El período preelectoral no es ajeno tampoco a la decisión de no intentar siquiera esa reconducción de emergencia.

La comisión sí solventó ayer la iniciativa del PP que dio origen a la ponencia, y que perseguía modificar únicamente los artículos 16 y 17 de la ley por la que se rige EITB. Su objetivo era obligar al Gobierno a presentar al inicio de cada legislatura, y en un plazo máximo de tres meses, su candidato a director general del ente, así como limitar su continuidad en funciones a seis meses.

El tripartito se presentaba, además, dividido en las enmiendas, con el PNV y EB opuestos a limitar la interinidad un lado y EA a favor con su propia enmienda. Finalmente, ante la imposibilidad de emitir el dictamen sobre la reforma de la ley en su conjunto, los grupos retiraron sus enmiendas y votaron en contra de la propuesta del PP, salvo el PSE, que se abstuvo.