Trabajadores de Faurecia protestan por las regulaciones
Los ajustes laborales debidos a la crisis ya están provocando protestas sociales en Galicia. Ayer, medio centenar de trabajadores de la factoría Faurecia Asientos, que trabaja en exclusiva para PSA Peugeot Citroën de Vigo, se concentraron ante las oficinas de la inspección de Trabajo para manifestar su rechazo a un segundo Expediente de Regulación de Empleo que estudia presentar la multinacional. Roxelio Salgado, presidente del comité de empresa, explicó que afectaría a 260 empleados y recordó que este lunes termina el plazo de negociación con la dirección para llegar a un acuerdo que evite una regulación drástica. Los trabajadores recuerdan que se trata de una empresa "boyante" que tuvo más de nueve millones de euros de beneficios el año pasado. El primero de los expedientes, ya presentado, afectó a 100 trabajadores y supuso una reducción temporal del empleo. Citroën, por su parte, también anunció ayer más recortes de fabricación en diciembre, con la paralización de sus líneas durante seis días.
Ajustes en CIE
La empresa vasca CIE, con una planta en Ourense, va por el mismo camino. En un comunicado ha anunciado que pondrá en marcha un plan de "racionalización" de la plantilla en sus fábricas españolas a lo largo de los próximos meses. Sin más concreciones, la empresa justifica este ajuste de puestos de trabajo por la caída de las ventas de coches. En CIE Galfor, situada en el polígono de San Cibrao das Viñas, trabajan 385 personas en la fabricación de piezas de acero forjadas. Exporta la mitad de su producción al resto de Europa y Estados Unidos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.