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La oposición exige participar en el control de las ayudas a empresas

Vallejo rechaza de plano crear una comisión de seguimiento en el Parlamento

Lourdes Lucio

La lluvia de millones que el Gobierno andaluz va a destinar a rescatar y salvar empresas con problemas de liquidez (87 millones de euros hasta diciembre de 2009) no concita el rechazo frontal de los grupos de la oposición, pero sí dudas sobre su ejecución. Partido Popular e Izquierda Unida plantearon ayer en el Parlamento la misma exigencia: participar a través de una comisión parlamentaria en el control de esos recursos públicos. El PP incluso reclamó la actuación excepcional de la Cámara de Cuentas para fiscalizar el destino de los fondos.

El control del Parlamento no figura en las previsiones del consejero de Innovación, Ciencia y Empresa, Francisco Vallejo, según dejó claro ayer en una comparecencia. Y no sólo no lo tiene previsto, sino que además, como sus adversarios, también desconfía de la utilidad de que la oposición vise los papeles de las ayudas en la Cámara.

Vallejo mostró dos caras ante la misma petición de la izquierda y de la derecha. Con el portavoz de IU, Pedro Vaquero, se mostró conciliador y le reconoció su "buena voluntad" a la hora de demandar un seguimiento parlamentario de los préstamos. Pero a la portavoz del PP, Ana Rico, le negó cualquier beneficio de la duda.

El consejero reconoció que la concesión de fondos públicos a empresas con problemas para obtener créditos bancarios es una medida "con una gran discrecionalidad", porque algunas se quedarán fuera del reparto y que ese flanco no lo van a desaprovechar políticamente sus rivales. "Llevo muchos años en política y no conozco ni un solo caso en el que la oposición no haya aprovechado cualquier oportunidad para dinamitar al gobierno", dijo. Vallejo aseguró que ante una medida de este calado el Ejecutivo debía asumir su responsabilidad y las críticas por posibles errores.

Pero esta cara más o menos amable se volvió destemplada cuando replicó al PP, cuya portavoz pidió controles de "más calado para que las ayudas lleguen a donde tienen que llegar". Vallejo atribuyó al presidente del PP, Javier Arenas, el haber criticado los préstamos de la Junta a las empresas porque irían a parar a "los amiguetes" de los socialistas. "Eso es muy duro: cuando se cuestiona la honestidad de un gobierno incluso antes de que actúe, se cuestiona la democracia, le están diciendo a los ciudadanos que los políticos son corruptos por naturaleza", añade.

Los fondos de hasta 10 millones de euros que van a poder recibir las empresas deberán pasar por cuatro filtros: el acuerdo de los trabajadores de la sociedad; el análisis de la comisión de seguimiento de sindicatos y empresarios; la notificación de las ayudas a la Unión Europea; y el sometimiento a una auditoría.

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Vallejo anunció cambios en la orden de incentivos a las empresas rentables. Se ampliará el límite de los préstamos reembolsables, estipulado ahora en 600.000 euros.

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