Barcelona exige a la Generalitat que cumpla con el gasto social "que le toca"

La construcción de guarderías, las escuelas municipales, los programas de juventud, los nuevos centros de asistencia social, los equipamientos como comedores y albergues, entre otros servicios que presta el Ayuntamiento de Barcelona, son los que en el presupuesto de 2009 se llevan la parte del león del gasto con cerca de 394 millones de euros. Supone un incremento del 24% respecto a lo gastado en 2008 (347 millones). "Se trata de un esfuerzo que tiene que ser compartido por la Generalitat, que debe asumir el aumento de la parte del gasto social que le toca", afirmó el tercer teniente de alcalde del Consistorio, Ricard Gomà (ICV) en la presentación del presupuesto del Ayuntamiento para el año próximo.

La acción social acapara el gasto del Consistorio para el año próximo

Lo que "le toca" es afrontar dos tercios de la factura social, al margen de la aplicación de la Ley de Dependencia. Ése fue el compromiso adquirido en 2005 entre ambas administraciones. Actualmente, el Gobierno catalán apenas sufraga un tercio y el resto va a cargo de las cuentas del Ayuntamiento. "Es una negligencia histórica que ha padecido la ciudad durante 23 años", añadió el cuarto teniente de alcalde, Jordi William Carnes, en referencia implícita a los gobiernos de CiU.

Tanto Carnes como otros concejales se niegan a que la coyuntura de la crisis pueda ser ahora la excusa del tripartito de la Generalitat para no corregir un desequilibrio histórico. Y compromisos aparte, porque es un hecho que las necesidades sociales crecerán en 2009.

Las cuentas del año que viene ya han sido confrontadas con Esquerra Republicana, ex socio que el año pasado dio su apoyo a los presupuestos y que este año lo hizo con las ordenanzas fiscales, lo que viene a ser el aperitivo de los presupuestos.

Para este año está previsto un presupuesto de 2.438 millones de euros, lo que representa un incremento del 3,6%. El capítulo de inversión es prácticamente calcado al del año pasado, con 544 millones de euros.

Lo que sí cambia sensiblemente es que se trata del primer año en el que no se amortiza la deuda. Actualmente, el Ayuntamiento debe a los bancos 770 millones de euros y 140 más por parte de las empresas municipales. La deuda ha ido disminuyendo progresivamente desde 1993 -salvo los dos años previos al Fórum- hasta liquidar 751 millones. "Esa liquidación de la deuda es lo que nos ha supuesto un ahorro que ahora nos ayuda a gestionar los presupuestos en épocas de crisis y poder mantener la inversión", insistía Carnes.

De momento, el Ayuntamiento no recurrirá el recurso de aumentar la deuda para hacer frente a los servicios. Pero todo puede pasar, vino a decir el propio responsable de las cuentas. "Dependerá de cómo vaya evolucionando el año", precisó. De momento, los presupuestos ya prevén un descenso en la recaudación de los impuestos municipales ligados al sector inmobiliario, a las licencias de construcción y a la venta de vehículos.

Después del capítulo de acción social, otros que concentran el gasto en 2009 son el de medio ambiente, que incluye los servicios de limpieza, que acapara 331 millones de euros, y el de seguridad y movilidad con 204 millones.