Zapatero advierte de que la sede de la UPM "está muy disputada"

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, contuvo ayer el optimismo del Ministerio de Asuntos Exteriores sobre las posibilidades de que Barcelona se haga con la secretaría permanente de la Unión por el Mediterráneo (UPM), cuya sede se decidirá los próximos 3 y 4 de noviembre en la reunión ministerial de Marsella (Francia).

Zapatero advirtió ayer de que la elección está "muy disputada", por lo que hay que ser "prudente" sobre el resultado, a pesar de que el Gobierno "está volcándose", según aseguró, a favor de la candidatura. Zapatero coincidió el miércoles y ayer con los jefes de Estado y Gobierno de los Veintisiete en el Consejo Europeo de Bruselas, y aunque no ha trascendido que lograse más apoyos para la capital catalana, que rivaliza con Túnez y La Valeta (Malta), aseguró que "las cosas no van mal".

Zapatero, que no quiso citar a los rivales de Barcelona en esta carrera, subrayó que "el Mediterráneo es un ámbito político, económico y social con gran influencia en la Unión Europea y en el contexto de las relaciones internacionales".

Según fuentes diplomáticas citadas por la agencia Efe, una de las principales bazas de Barcelona para albergar la secretaría permanente de la UPM son sus buenas relaciones con los países árabes y el hecho de que no haya ningún firme opositor a su candidatura, pues la sede debe elegirse por consenso de los 43 países que integrarán este organismo. Túnez, que anunció dos días atrás su candidatura, no mantiene relaciones diplomáticas con Israel, uno de los miembros de la UPM, lo que podría frenar sus aspiraciones. Además Israel se opone a la integración de la Liga Árabe en este proceso, que nació en 1995 precisamente en Barcelona.

La Generalitat y el Ayuntamiento han ofrecido el palacio de Pedralbes como futura sede de la secretaría.