Rajoy rectifica y decide apoyar con reservas el plan financiero

Durante toda la semana, el líder del PP y sus segundos espadas fueron hinchando el globo. El martes, cuando el Gobierno presentó el plan de 50.000 millones de euros para hacer préstamos a los bancos, Rajoy señaló que tenía que estudiarlo. Poco a poco se fue calentando, mientras sus portavoces sentenciaban que el plan sólo servía para los bancos y aseguraraban que el PP no quería ser "corresponsable" de una medida en la que no creía.

Zapatero pedirá al PP "apoyo incondicional" al acuerdo europeo

Al final, fue el propio Rajoy quien llegó más lejos. El sábado dijo en A Coruña que el PP no estaba dispuesto a apoyar el plan de 50.000 euros si no había garantías de que serviría para familias y pequeñas empresas y acusó a Zapatero de ayudar a sus "amiguetes" de los bancos y olvidarse de las familias.

Pero ayer, después del gran pacto europeo que ha avalado este y otros planes de ayuda puestos en marcha por varios países de la UE, Rajoy dio un giro de 180 grados. Criticó el plan, expuso sus reservas, dijo que quiere transparencia y que se cree una comisión parlamentaria de seguimiento, pero sentenció: "Vamos a apoyarlo".

¿Qué ha pasado entre las dos posiciones? Preguntado ayer expresamente por la posibilidad de que los presidentes de algunos bancos españoles se hayan puesto en contacto con él para presionarle, Rajoy lo desmintió tajantemente: "Nadie me ha llamado". Es más, en una rueda de prensa en la sede central del PP mucho más tensa de lo habitual, en la que un Rajoy displicente y seco replicaba una y otra vez "no tengo nada que decir", "no voy a contestar a eso", o "me remito al comunicado", el líder del PP incluso negó el evidente cambio de posición.

Sin embargo, varias fuentes de la dirección han confirmado estos días a EL PAÍS que desde el martes las llamadas de presidentes de bancos al líder del PP y otros dirigentes han sido muy frecuentes. Todas tenían el mismo objetivo: convencerle de que apoye el plan. De hecho, Rajoy es prácticamente el único líder de la oposición en Europa que no estaba dando apoyo cerrado a su Gobierno en esta semana turbulenta en todos los mercados europeos. La gran coalición alemana, que estaba en crisis, se ha reforzado estos días, según la prensa alemana. Hay un ejemplo aún más claro. En Inglaterra, donde gobierna la izquierda y la derecha está en la oposición, David Cameron ha apoyado sin fisuras el plan propuesto por el primer ministro, Gordon Brown. "Ayudaremos a dar a los bancos el capital que necesitan. Los conservadores apoyan la acción del gobierno cuando los fundamentos y el sistema bancario están amenazados", sentenciaba en un artículo en Financial Times.

Dentro de los estrategas de Rajoy, algunos señalaban en estos días que era muy delicado quedarse fuera de un plan que, en medio de la crisis, no ha sido mal recibido por la opinión pública.

Mientras, Zapatero reclamará a Rajoy, un "apoyo incondicional" ante el reto de la crisis económico-financiera y para que respalde en el Parlamento las medidas que ha puesto en marcha el Gobierno. Zapatero avanzó ayer que este año el Estado concederá a los bancos avales por importe de hasta un máximo de 100.000 millones de euros, como parte de la medida anunciada para garantizar la deuda nueva que contraigan las entidades finencieras hasta el 31 de diciembre de 2009.

Zapatero había hablado con Rajoy minutos antes de hacer este llamamiento. El presidente trasladará hoy al líder del PP "información exhaustiva" del alcande de las medidas. Aunque Rajoy se quejó de que Zapatero sólo le va a informar y no a consultar -los populares se quejan de que el Ejecutivo no ha contado con ellos para nada- el presidente aseguró que "volcará todo su esfuerzo" para buscar un acuerdo hoy en Moncloa.