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Ondarroa dará un mes de plazo a los insumisos fiscales para pagar voluntariamente

La gestora que gobierna el Ayuntamiento de Ondarroa ha dado un mes de plazo a los vecinos que se niegan a pagar los impuestos locales para que cumplan con sus obligaciones tributarias antes de que la Hacienda foral asuma su recaudación ejecutiva. La gestora ha suscrito el convenio que anunció con la Diputación vizcaína para que esta se encargue del cobro de los tributos a los vecinos que no quieren pagar, una situación que se arrastra desde hace unos 16 años. La insumisión fiscal ha aumentado durante los últimos cinco años -desde que la izquierda abertzale perdiera la alcaldía al ser ilegalizada- con una campaña promovida en los últimos tiempos por el entorno de ANV. La deuda tributaria generada por este boicot de más de tres lustros se eleva a 2,3 millones de euros.

Fuentes municipales precisaron a EL PAÍS que el plazo de un mes para pagar se abrirá "a finales de verano", sin concretar la fecha, aunque previsiblemente se extenderá entre los últimos días de septiembre y los de octubre próximos. Los vecinos que se sigan negando a pagar tendrán que enfrentarse a la Hacienda foral, que iniciará el procedimiento de apremio, con "un sensible incremento de las cantidades a pagar, por la aplicación de los intereses de demora, recargos y costas, además de la multa", destacó el consistorio, que no ha cuantificado el número de morosos.

Deudas prescritas

Gran parte de la cantidad pendiente no se podrá cobrar al haber prescrito la deuda. La gestora, gobernada por el PNV desde hace un año, después que el Ayuntamiento no se pudiese constituir tras las últimas municipales por la presión de los radicales, intentó hace unos meses encargar el cobro a una empresa especializada. La presión del entorno de ANV, con amenazas a la compañía, llamadas telefónicas y una campaña en Internet, obligó a declarar desierto el concurso, al que sólo se había presentado la firma Gesmunipal.

El convenio firmado delega la gestión de la recaudación ejecutiva -cuando el contribuyente no paga voluntariamente- en la Diputación. El consistorio seguirá cobrando los tributos locales a los vecinos que cumplan con sus obligaciones.

Los tributos municipales suponen entre el 30% y el 35% de los ingresos ordinarios del consistorio. El PP criticó ayer que se haya tardado más de un década en adoptar esta decisión y exigió que se cobre "el 100% de las cantidades defraudadas".

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